El Popular prevé cerrar la fusión con el Pastor en apenas un mes

Rubén Santamarta Vicente
rubén santamarta REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

La compra facilitará cumplir con los requisitos europeos de capital

02 feb 2012 . Actualizado a las 11:20 h.

La alianza entre Banco Popular y Banco Pastor estará lista en apenas un mes, con la exclusión de Bolsa de la entidad gallega (siempre que un 90 % de sus accionistas aprueben el canje de acciones) y su incorporación legal a la firma madrileña. Así se lo expusieron ayer directivos del Popular a los analistas nacionales e internacionales durante la presentación de sus resultados anuales. La alianza con el Pastor, además, permitirá al grupo cumplir con los nuevos requisitos de capital que exige Europa para el mes de junio, con un 9 % de core capital. Ayudarán a todo ello unas sinergias confirmadas de unos 800 millones de euros.

Son las del 2011 las últimas cuentas que ambos bancos presentarán por separado (el Pastor lo hará el día 16); el balance del primer trimestre de este 2012 ya será de todo el nuevo grupo financiero, el quinto del país a la espera de que el Sabadell incorpore la CAM y le arrebate ese puesto. Por si acaso, el Popular ya está preparado para afrontar nuevas alianzas. Dentro o fuera de España, como en Estados Unidos, donde «el negocio minorista está funcionando bien», apuntó Ángel Ron, presidente del banco.

¿Y cómo aprovechará el Popular los movimientos que se auguran en su territorio? Ron dejó entrever que el banco tomará posiciones para hacerse con alguna firma, y volvió a mostrarse rotundo -como ya hizo en comparecencias anteriores- en contra de dejar con vida a entidades con viabilidad dudosa. «Sostener a costa del contribuyente bancos zombis, incapaces de sobrevivir por sí mismos, es lo último que necesita el sector financiero español [...], es un lujo que no nos podemos permitir», apuntó sin dar nombres. Sí se le preguntó por una de esas firmas en el disparadero: Bankia, el primer banco del país. «Es una buena franquicia y saldrá adelante», dijo. Es una respuesta similar a la que ofreció el martes Emilio Botín, del Santander.

El Popular cerró el ejercicio con un beneficio final de 479 millones de euros, un 18 % menos que en el 2010, lastrado por un incremento en sus gastos de administración (un 5 %) que han empeorado la eficiencia -una de las principales banderas del grupo-, aunque sigue estando a la cabeza del sector. A la caída de ganancias también han contribuido las provisiones extra que está haciendo el banco para cubrir su morosidad. Solo para inmuebles anticipó 325 millones en el primer trimestre. La morosidad de la empresa roza ya el 6 % -un punto y medio por debajo de la media- y el crédito sigue estancado: el hipotecario se ha congelado y el comercial ha caído un 3 %.

«Sostener a costa del contribuyente bancos zombis es lo último que necesita el sector financiero»

Ángel Ron