Arranca el AVE gallego a La MecaLa ourensana Copasa es la firma privada con mayor participación en el proyecto
ECONOMÍA
El megaproyecto hispano-saudí para construir el AVE del desierto entre La Meca y Medina, en Arabia Saudí, arrancó ayer oficialmente con la firma del contrato en el que participaban doce empresas españolas y dos árabes. Se trata de la mayor adjudicación internacional obtenida por compañías españolas (6.736 millones de euros).
Bajo la denominación High Speed Railway (HHR) se esconde un gran proyecto en el que se construirán 450 kilómetros de vía doble para trenes que alcanzarán los 320 kilómetros hora. Las previsiones apuntan a que el AVE del desierto será utilizado por más de 160.000 viajeros diarios en los períodos punta de peregrinación a La Meca para lo que se suministrarán 35 trenes. El objetivo es que una vez que esté construida la línea, La Meca y Medina estén unidas en apenas dos horas y media.
La magnitud de la actuación hizo que para la firma del contrato en Riad, la capital de país de Oriente Medio, se desplazaran ayer los ministros españoles de Fomento, la gallega Ana Pastor, y de Exteriores, José Manuel García-Margallo. En el evento, que sirvió para dar el pistoletazo de salida a la infraestructura ferroviaria, también participó el príncipe saudí Abdul Aziz.
En unas declaraciones recogidas por Efe, la ministra gallega calificó el proyecto de «reto de gran envergadura» para las doce empresas españolas que participan en el consorcio. La responsable de Fomentó aseguró que la firma del contrato muestra que «las empresas españolas son punteras en innovación y tecnología», y un ejemplo de cooperación entre el sector público y el privado. También destacó el papel del rey Juan Carlos I, ya que aseguró que su buena relación con el monarca saudí, Abdullah, tuvo gran parte del mérito de que se pudiera llegar a un acuerdo.
Relevancia
La relevancia del contrato queda de manifiesto en el hecho de que el Gobierno saudí optó por un procedimiento de adjudicación en varias fases. La primera comprendía el diseño y construcción de la infraestructura, y la que se firmó ayer está relacionada con la construcción de la vía, el suministro de trenes, la puesta en marcha del servicio y el material de la línea.
La cuota gallega al AVE del desierto la aporta la constructora ourensana Copasa, que lidera la iniciativa privada en el proyecto al ser la que tiene una mayor participación. La sociedad presidida por José Luis Suárez asumirá 639,10 millones de euros (el 10, 78 %) del contrato de la obra que vincula al Gobierno saudí con el consorcio Al Shoula Group. Su presencia solo será superada por Talgo, y se queda por delante de empresas como OHL (586,2 millones de euros) e Imathia (208,9 millones). Copasa se encargará del suministro y montaje de la vía (balasto, traviesas y carril), de la construcción de las bases de montaje y del futuro mantenimiento de la infraestructura por un período de doce años.
Felicitación a José Blanco
En su intervención, Ana Pastor también recordó el papel de su antecesor en Fomento, el exministro socialista gallego José Blanco. Por su parte, García Margallo, destacó la «máxima excelencia de las empresas españolas» que participan en el consorcio.