La zona euro afronta bajo presión otra semana de tensiones

Colpisa

ECONOMÍA

Los ministros de Finanzas del Eurogrupo mantienen mañana una reunión telefónica para abordar cuestiones clave.

18 dic 2011 . Actualizado a las 21:49 h.

La zona euro se prepara para una semana delicada que comenzará con una reunión telefónica el lunes de sus ministros de Finanzas sobre el aumento de los recursos del Fondo Monetario Internacional, para que éste a su vez pueda ayudarles, y negociaciones respecto a su «pacto presupuestario» ante la crisis de la deuda. La eventualidad de una degradación de la nota de varios países del euro continuará pesando sobre esas reuniones, cuyo objetivo es dar forma a algunas de las decisiones adoptadas en la última cumbre europea, los días 8 y 9 de diciembre.

La agencia Standard & Poor's avisó a comienzos de diciembre de que podría bajar la calificación crediticia de 15 países de la zona euro. El viernes pasado otra calificadora, Fitch, se le adelantó al rebajar a »negativa« la perspectiva de Francia y amenazar con recortar las notas de España, Italia, Bélgica, Eslovenia, Chipre e Irlanda hacia finales de enero a más tardar.

En ese contexto los ministros de Finanzas de la zona euro mantendrán este lunes una conferencia telefónica para hablar de cuestiones técnicas vinculadas a la crisis de la deuda, declararon fuentes gubernamentales. «Habrá una reunión telefónica del Eurogrupo el lunes por la tarde» hacia las 16:00 horas «para discutir las consecuencias de la cumbre europea de los días 8 y 9 de diciembre». En el encuentro se abordarán los medios para resolver la crisis de la deuda, destacaron estas fuentes.

En su última cumbre, la zona euro y otros países de la UE acordaron destinar al FMI hasta 200.000 millones de euros mediante préstamos bilaterles. La idea es que la institución preste dinero después a los países de la divisa común en dificultades y que los estados emergentes sigan el ejemplo y participen también en la recapitalización del fondo. Los europeos se dieron un plazo de diez días para cerrar los detalles de la operación. «Los europeos todavía discuten al respecto entre ellos, por ahora no hay gran cosa. El reparto parece complejo: se trataba de que fuesen 150.000 millones de euros de la zona euro y 50.000 millones de euros del resto de la UE», indicaron fuentes implicadas en la negociación.

Hasta ahora, algunos países han mostrado su acuerdo con el plan, pero sin anunciar el monto de su contribución. Otros ni siquiera se han pronuncado.

Bélgica anunció que estaba dispuesta a contribuir con unos 9.500 millones de euros. Reino Unido, en cambio, se niega a participar en los préstamos. «Nosotros no hemos asumido un compromiso específico para incremntar los recursos del FMI. Fuimos claros sobre el hecho de que no contriburemos a esos 200.000 millones de euros», subrayó un portavoz del primer ministro británico David Cameron.

Otra cuestión en la agenda de la zona euro es el comienzo de las negociaciones técnicas respecto al tratado intergubernamental sobre disciplina presupuestaria reforzada pactado el 8 y 9 de diciembre. Los dirigentes europeos, salvo Cameron, se habían puesto de acuerdo para asumir las consecuencias de la crisis de la deuda mediante un acuerdo que prevé imponer el equilibrio presupuestario mediante un sistema de sanciones automáticas para los países incumplidores. Para que dichas decisiones sean aplicadas ese acuerdo tomará la forma de un tratado entre los países de la Eurozona y otros estados que quieran asociarse.