EE.UU. pide más esfuerzos ante la amenaza de quiebras en «cascada»
25 sep 2011 . Actualizado a las 06:00 h.La cumbre del FMI se cerró ayer en Washington sin una respuesta contundente a la crisis financiera, y con nuevas incertidumbres. El gobernador del banco central de China, Zhou Xiaochuan, afirmó ayer en Washington, en el pleno del Comité Monetario y Financiero Internacional del Fondo, que las reservas del organismo podrían no ser suficientes ante el agravamiento de la crisis.
Zhou explicó que los alrededor de 630.000 millones de dólares que actualmente integran las reservas «podrían no ser adecuados para afrontar las necesidades potenciales de los países golpeados por la crisis».
La directora gerente del FMI, Christine Lagarde, admitió también en un plan de acción publicado ayer que las reservas son «débiles» en relación con las necesidades potenciales, aunque suficientes en la actualidad. Igualmente el secretario del Tesoro de EE.?UU., Timothy Geithner, destacó la necesidad de fortalecer el FMI, así como de reformar su estructura. En su intervención, Geithner pidió a la UE que ponga en marcha «cortafuegos» que impidan más contagios, en referencia a la crisis de deuda, al tiempo que reclamó un «compromiso inequívoco» por parte del Banco Central Europeo (BCE).
El secretario del Tesoro usó un lenguaje casi apocalíptico, al afirmar que «la amenaza de una cascada de quiebras, retiradas masivas de depósitos bancarios y riesgos catastróficos debe ser sacada de la mesa, ya que de otro modo socavará los esfuerzos europeos y globales». Que la crisis de deuda que asola la UE es el problema más grave y preocupante a escala global en estos momentos quedó claro en el comunicado de cierre de la reunión de los miembros del Comité Financiero y Monetario Internacional del FMI. El organismo, que se comprometió a «actuar decisivamente» para afrontar los retos económicos mundiales, se esforzó en transmitir confianza, afirmando que «los países de la eurozona harán todo lo necesario» para asegurar la estabilidad.