Trichet no ve presiones inflacionistas que hagan necesario subir el precio del dinero

Arantxa Iñiguez / Efe

ECONOMÍA

Tras el anuncio de mantener los tipos de interés en el 1,5% en la zona euro, el presidente del BCE alerta del riesgo de un mayor debilitamiento del crecimiento económico.

08 sep 2011 . Actualizado a las 21:32 h.

El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean-Claude Trichet, alertó este jueves de la «elevada incertidumbre» sobre la economía de la zona del euro y el riesgo de un mayor debilitamiento del crecimiento económico.

En la rueda de prensa tras la reunión del consejo de gobierno del BCE, que decidió mantener por unanimidad los tipos de interés en el 1,5 % en la zona del euro, Trichet dijo también que los riesgos para la estabilidad de precios están equilibrados, lo que significa que no ve presiones inflacionistas que hagan necesario subir el precio del dinero.

El Banco de Inglaterra (BoE) también mantuvo su tasa de interés en el 0,5 %, nivel en el que permanece desde marzo de 2009 y pese a una inflación del 4,4 % en el Reino Unido.

El BCE revisó también hoy a la baja sustancialmente sus previsiones de crecimiento económico de la zona del euro para 2011 y 2012 debido a la reaparición de tensiones en los mercados financieros.

«El crecimiento económico de los países que comparten el euro se ha ralentizado por la moderación del ritmo de crecimiento global, la caída de los precios de las acciones y de la confianza empresarial, así como los efectos desfavorables que resultan de las tensiones en algunos mercados de deuda soberana del área euro», según el BCE.

El BCE pronostica ahora un crecimiento económico para este año de los países que comparten el euro de entre el 1,4 y el 1,8 %, lo que supone una media del 1,6 %, en comparación con el 1,9 % pronosticado en junio.

Además, la entidad monetaria europea prevé que la zona del euro crecerá en 2012 una media del 1,3, en un rango entre el 0,4 y el 2,2 %, frente al 1,7% pronosticado en junio.

Asimismo, el BCE mantuvo sus pronósticos de inflación para este año, entre el 2,5 y el 2,7%, y los revisó a la baja para 2012.

La inflación se situará en 2012 entre el 1,2 y el 2,2 %, lo que supone una media del 1,7 %, según las últimas estimaciones del BCE, mientras los analistas de los bancos Commerzbank y UniCredit consideran que el BCE mantendrá su tasa rectora en el 1,5 % hasta finales de año.

En la conferencia de prensa Trichet dijo que el BCE está satisfecho con las últimas medidas que ha adoptado el Ejecutivo de Italia ya que «son conformes con el primer compromiso del Gobierno italiano».

El Gobierno italiano aprobó hoy un proyecto de ley para introducir en la Constitución la llamada «regla de oro» sobre el equilibrio presupuestario, en línea con otros países de la eurozona como Alemania y España, y el Senado dio el miércoles el primer sí al plan de ajuste de cerca de 54.200 millones de euros del Gobierno Berlusconi para el próximo bienio.

Asimismo, Trichet alentó a España a implementar lo antes posible las medidas que ha aprobado el país.

El presidente del BCE defendió también la gestión de la entidad europea en la actual crisis financiera en respuesta a las críticas en Alemania a la compra de deuda pública.

Trichet dijo que «en la peor crisis desde la Segunda Guerra Mundial hemos mantenido la confianza en la divisa y en nuestra capacidad de proporcionar estabilidad de precios no por casualidad, sino porque decidimos frecuentemente hacer cosas que no nos recomendaban algunos gobiernos ».

«Si nos hemos embarcado en el programa de compra de deuda pública es por razones de política monetaria y para ayudar a mejorar la transmisión de nuestras decisiones relacionadas con los tipos de interés, porque los Gobiernos no se han comportado apropiadamente y no han sido cuidadosos», añadió Trichet.

Muchos bancos centrales del mundo enfocan actualmente sus políticas monetarias en apoyar el crecimiento económico.

El Sveriges Riksbank (Banco Central de Suecia) mantuvo esta semana su tasa rectora en el 2 % y sugirió que no llevará a cabo incrementos a corto plazo, ya que espera ahora que la ralentización de la economía sueca va a ser más pronunciada que lo previsto en julio.

El Banco de Canadá también dejó inalterados los tipos de interés en el 1 % y expresó su preocupación por el deterioro de las perspectivas de la economía mundial, mientras el Banco de la Reserva de Australia también ha señalado que no va a modificar los tipos de interés.