La crisis del naval gallego arrastra al principal astillero de Portugal

Manoli Sío Dopeso
m. sío dopeso VIGO / LA VOZ

ECONOMÍA

Estaleiros Navais de Viana do Castelo suprime 380 de sus 720 empleos

12 jul 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Hace dos años, cuando las gradas de montaje de Hijos de J. Barreras estaban al completo y los pedidos en cartera sumaban 700 millones de euros, Estaleiros Navais de Viana do Castelo (ENVC), llegó a tener hasta un millar de operarios gallegos trabajando en buques desviados al norte luso por falta de espacio en los diques de Beiramar.

La subcontratación de las instalaciones portuguesas, principalmente para el pintado de buques, fue una práctica común en el quinquenio de oro (2005-2009), sobre todo entre los astilleros de la ría de Vigo, en donde no existe ninguna instalación de dique seco para esta labor.

La caída de la contratación naval, sumada a la pérdida de las subcontratas gallegas han hecho mella en el mayor astillero de Portugal, que se enfrenta a un duro plan de reestructuración, cuya fecha de ejecución ha quedado aplazado hasta septiembre como consecuencia de la movilización sindical.

La reestructuración de Estaleiros de Viana fue aprobado por el Gobierno socialista de José Sócrates. Un día antes de que el nuevo Ejecutivo socialdemócrata de Passos Coelho asumiera el poder, el órgano gestor de la empresa pública anunció la ejecución de «inmediato» del ajuste y nuevo plan de viabilidad de la empresa estatal que supondrá la salida, a finales de este año, de 380 de los 720 empleados, además de su encauzamiento hacia la senda de las privatización.

La empresa pública tiene un pasivo acumulado de 200 millones de euros y cerró el 2010 con pérdidas de 40 millones de euros. El lado bueno es que cuenta con una cartera de pedidos de 500 millones de euros, de los que 130 han sido contratados en una visita realizada por Hugo Chávez a Viana a finales del 2010, cuando encargó varios buques cementeros.

Otra consecuencia directa del impacto de la crisis gallega sobre la construcción de barcos en Portugal (aunque no de acero, sino de fibra), es la situación que atraviesan las de dos factorías del grupo Rodman en el norte luso. Hace un año que la carga de trabajo de Rodman Lusitania se trasladó a Meira (Moaña). Las naves siguen abiertas pero carecen de trabajo. La otra instalación de Conafi, permanece inactiva.

1.000

Trabajadores gallegos

Entre el 2008 y el 009 llegó a tener 1.000 gallegos trabajando en barcos de Barreras.

40 millones de ?

Pérdidas en el 2010

La empresa estatal tiene un pasivo acumulado de 200 millones de euros.