Discrepancias políticas provocan tensiones en la unión vasca y en la que lidera Cajastur

La Voz

ECONOMÍA

30 jun 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Mientras Bankia y Banca Cívica comienzan su carrera para salir al parqué, otras dos operaciones de fusión se enfrentan a unos días clave para definir su futuro. Hoy tendrá que despejar su alianza Effibank, la entidad surgida de la fusión de Cajastur, Caja Cantabria y Caja Extremadura y que tendrá su sede en Madrid.

Las primeras dudas las ha alentado Foro Asturias, el partido de Cascos, que ha pedido que se paralice la operación porque supondrá que la comunidad pierda su entidad financiera. Mientras, en Extremadura ha sido el PP de esa comunidad el que ha puesto pegas para la fusión al entender que la caja de ese territorio sale perjudicada. Sin embargo, tras la fallida operación de estas cajas con la CAM, a la que expulsaron de su alianza, el Banco de España no está dispuesto a consentir que se frustre otro SIP. De hecho, ayer mismo la asamblea de Cajastur dio su visto bueno a la operación, y hoy, salvo sorpresa, harán lo propio las otras dos firmas.

La otra operación en el aire es la fusión vasca, popularmente conocida como Kutxa Bank. La alianza de las tres cajas de esa comunidad ha topado con Bildu, contrario a una alianza en forma de banco. Pero también con el PP de Álava, que teme que Caja Vital -una entidad cercana a ese partido- ceda peso en la fusión en favor de la BBK, más próxima al PNV.