Los test de estrés a las cajas incluyeron 8.312 millones del FROB en 6 fusiones

Miguel Á. Rodríguez REDACCIÓN/LA VOZ.

ECONOMÍA

Cinco alianzas de entidades españolas no fueron analizadas y solo la de Banca Cívica no tendrá ayudas públicas.

22 jul 2010 . Actualizado a las 18:13 h.

Las pruebas de estrés que la UE publicará mañana y que servirán para medir la fortaleza del sector financiero español analizaron ocho bancos y 18 cajas en España. La ministra de Economía, Elena Salgado, garantizó esta semana que todas ellas han superado las pruebas de esfuerzo con nota. Pero de las doce fusiones en marcha en el sector de las cajas de ahorro, únicamente siete han sido analizadas en su totalidad. Y solo una de ellas, la de Banca Cívica, formada por Caja Navarra, Canarias y Caja Burgos, no contará con ayudas públicas.

Las otras seis consumen juntas 8.312 millones del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), de los 12.000 dispuestos por el Banco de España para colaborar en el adelgazamiento del sector, que reducirá de 45 a solo 20 el número de cajas en España. Además de la fusión gallega, que precisará 1.162 millones de apoyo, será estudiado el SIP liderado por Caja Madrid y Bancaja (4.464); el de Caixa Catalunya con Tarragona y Manresa (1.250); el de Murcia con Penedés, Granada y Sa Nostra (915); la de Sabadell, Terrasa y Manlleu (380), y la de Caja Duero con Caja España (525).

Excepto el dinero público que servirá para salvar a las dos cajas intervenidas (Caja Castilla La Mancha y Cajastur), las pruebas de estrés de Bruselas revisarán todas las alianzas que han requerido ayudas excepto una, la que lidera Cajastur junto con la valenciana CAM -en donde ahora se viven momentos de tensión- y las cajas de Cantabria y Extremadura. En este caso, el test se aplicará únicamente a la CAM.

En el supuesto de que todas las entidades analizadas hayan superado con éxito los test elaborados por el Comité de Supervisores Bancarios Europeos (CEBS), cinco fusiones no podrán presumir de este aval que aportará Bruselas y que el Gobierno español esgrimirá como prueba de la fortaleza del sector financiero nacional. Pero en estas alianzas excluidas al menos una de las entidades aparece en las pruebas de estrés.

Sucede así en el SIP liderado por Cajastur, donde se sometió a examen a la CAM. En la fusión de Unicaja y Caja Jaén solo ha sido testada la primera de estas dos entidades; en la de Cajasol con Caja Guadalajara se estudió solamente la entidad andaluza; en la que forman la CAI con Caja Círculo y Badajoz habrá test sobre CAI; y en la absorción de Caixa Girona por La Caixa se estudió esta última.

Al margen de las fusiones del sector, Bruselas ha puesto la lupa sobre las tres cajas vascas (Kutxa, BBK y Caja Vital), sobre Ibercaja, sobre la Caja de Córdoba y sobre la de Ontinyent. La lista de bancos analizados incluye al Santander, el BBVA, el Popular, el Banco de Sabadell, Bankinter, el Pastor, la Banca March y el Banco Guipuzcoano.

Condiciones

Bruselas planteó tres escenarios de estrés para realizar las pruebas, en el caso español con una desviación máxima de 3 puntos sobre el PIB europeo, varios precios del petróleo y un índice máximo de desempleo del 25%.

Habrá uno de partida y dos adversos, y en todos se medirá el consumo de capital de cada entidad. La intención es juzgar la evolución del capital de máxima calidad (Tier 1) en función de tres variables básicas: evolución del PIB, del paro en el 2010 y el 2011, y de los tipos de interés a corto plazo. El tercer escenario incluirá el impacto adicional de riesgo soberano en la ratio de capital de las 91 entidades europeas analizadas. Será, no obstante, un ejercicio asimétrico, ya que los tipos de interés serán los mismos pero las variables de paro y PIB serán distintas en cada país.

Ayer, UBS pronosticó que en España se pondrá de manifiesto la necesidad de las entidades de recapitalizarse, lo que podría «inquietar» a los inversores.