Fuentes del entorno de Caixanova admitieron ayer que el equipo negociador de la caja está «expectante» con la «presión» que pueda ejercer la Xunta como regulador autonómico sobre el proceso de negociación.
Voces próximas al consejo de administración señalaron que la intención del equipo de Gayoso es mantener inflexibles sus condiciones, que pasan por controlar la nueva caja fusionada y garantizar la continuidad del presidente «al menos por cinco años». Solo una intervención de la Xunta podría alterar este planteamiento, según admiten portavoces cercanos a la caja.
Hoy se reunirán los consejos de las dos cajas en sesiones ordinarias y se supone que tanto Julio Fernández Gayoso, en Caixanova; como José Luis Méndez, en Caixa Galicia, trasladarán a sus máximos órganos de gobierno el estado de las conversaciones para la fusión.
En la caja viguesa será la primera vez que Gayoso informe oficialmente a su consejo sobre las propuestas que su equipo ha puesto encima de la mesa. El consejo de Caixanova únicamente aprobó que la entidad explorase la fusión, pero desconoce de manera formal lo que se está discutiendo. Caixa Galicia cuenta con el respaldo de su consejo para negociar una fusión «paritaria y equilibrada».
Voces próximas a la entidad que preside Gayoso sostenían ayer que la cita del consejo «debería ser decisiva» para conocer la «flexibilidad» que mostrará la caja en la negociación. Sin embargo, fuentes cercanas al presidente de Caixanova afirmaron que este «controla» la mayoría del consejo y que no le será «difícil» salir de la reunión con un «respaldo mayoritario a sus propuestas».