En pleno debate sobre la reforma de las pensiones, el BBVA hizo público ayer que su presidente, Francisco González, tiene ya a su alcance 79,77 millones de euros en concepto de pensión, tras haber cumplido los 65 años. En cualquier caso, no podrá acceder al dinero, externalizado en un seguro, hasta que abandone sus funciones ejecutivas en la entidad.
Con todo, el BBVA ha decidido suprimir las indemnizaciones por cese para los consejeros ejecutivos, ha reducido sus obligaciones en materia de pensiones y ha congelado su salario fijo, reduciendo sus retribuciones variables y adaptando sus sueldos al actual entorno de crisis internacional. Así se refleja en la información remitida a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) sobre la convocatoria de la junta de accionistas que se celebrará el 12 de marzo, en la que se indica que se han suprimido las tres posibles indemnizaciones para consejeros ejecutivos que existían, lo que supone para la entidad un ahorro de 178 millones de euros.? Estaba prevista la del presidente (94 millones), la del consejero delegado (69) y las del secretario general (15 millones).
Reducción de salarios
Además, el comité de dirección del BBVA se ha reducido casi un 14,5% la retribución del 2009 con respecto al año precedente, ya que -pese a contar con un miembro más-, sus salarios fijos han pasado de 6,8 millones en el 2008 a 6,2 el pasado año, mientras que los variables han bajado de 13,3 millones a 10,8 millones; de un total de 20,1 millones en el 2008 a 17 en el 2009. Desde el cierre del pasado año no hay compromisos de pago por indemnizaciones a los consejeros ejecutivos por ceses sin justificar.
En el caso del nuevo consejero delegado del BBVA, Ángel Cano, que accedió al cargo el pasado septiembre sustituyendo a José Ignacio Goirigolzarri como número dos de la entidad, mantiene el esquema de jubilación anticipada estándar del banco (75% del salario pensionable antes de cumplir 55 años y 85% después de esa edad).
En cuanto al sistema de previsión de las pensiones -cuyo esquema y condiciones se había mantenido desde la fusión del Banco de Bilbao Vizcaya y Argentaria-, el único compromiso que queda es con Cano, para lo que se han provisionado ya 13 millones, incluyendo todos los compromisos anteriores a su nombramiento el asado septiembre tras 18 trabajando para el BBVA.
En la información facilitada a los accionistas sobre la moderación del salario de los consejeros ejecutivos figura que los salarios fijos en el 2009 se congelaron, lo se volverá a hacer este año por tercer ejercicio consecutivo, y se reducirán las retribuciones variables. En este último capítulo se aplican varios modos de pago como que sean diferidas (en varios años) y que parte del bono se realice en acciones. En el caso del presidente, el salario fijo ha sido congelado en 1,9 millones de euros, mientras que la parte variable queda fijada en 3,4 millones, lo que supone una rebaja del 1%.