Retirados con 40, trabajando con 84

L. Villamor / F. Varela / C. Viu R. Loureiro / R. García

ECONOMÍA

Los españoles se jubilan de media a los 63 años y diez meses, pero el rango de edades a las que termina la vida laboral supera los cuarenta años, dependiendo del oficio

02 feb 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

LA GENTE DEL MAR

Depende de años de antigüedad la cantidad cotizada

El Régimen Especial del Mar establece coeficientes reductores de la edad de jubilación siempre por cada diez años cotizados. Así, si el coeficiente de los tripulantes de embarcaciones de menos de 10 toneladas es de 1,5 un marinero con 20 años de antigüedad podrá retirarse con 63. El coeficiente va según lo cotizado. Los mariscadores, lo que incluye a percebeiros, que son los que menos suelen pagar, solo tienen el 1% de reducción y han sido los últimos en conseguirlo. La mayor parte de las mujeres a duras penas llegan a los 15 años necesarios para cobra la pensión, por lo que trabajan hasta los 64. En Marina Mercante el coeficiente es de 0,40 (cuatro años por cada diez cotizados) para petroleros, quimiqueros y buques Supply.

LOS DE ASTANO

La reconversión buscó varias vías para adelgazar la plantilla

Astano, otrora un astillero de la ría de Ferrol con más de seis mil trabajadores, fue buscando diversos caminos para aligerar su plantilla. Así, un primer expediente de 1987 afectó a 3.314 personas, de las cuales 200 fueron prejubiladas ya entonces, con menos de 55 años años. En el turno de 1995 fueron más de 700 ya entonces con 55 años, y luego salieron otros 2.100 en el 2004, pero ya juntamente con Bazán porque ambas empresas habían sido unificadas en Izar (ahora Navantia). El caso de Imenosa, la sección de bienes de equipo de Astano, fue liquidada también con 410 retiros anticipados.

EL EMPLEADO DE BANCA

«Si se tiene capacidad de hacer cosas, me parece un derroche»

Las prejubilaciones no convencen a todo el mundo y es el caso de Gonzalo Romero Mengotti (Santiago, 1936), un vecino de A Coruña que se jubiló en Caixa Galicia, aunque en las entidades bancarias fuese una cuestión que se primase en otro tiempo. Asegura que sus compañeros le animaban a retirarse antes, pero explica: «No me interesaba prejubilarme. Hacía un trabajo que me parecía útil». En su caso, esperó hasta los 65 para la jubilación y asegura que no lo hizo a los 70, por motivos estrictamente económicos. Matiza que al haber sido planificada tampoco le cogió por sorpresa el cambio de vida. «Si tienes capacidades de hacer cosas, me parece un derroche, aunque reconozco que es de justicia y quienes eligen esa opción se lo han ganado con años de trabajo», explica. Relata que vivía dedicado a su empleo y afirma que la actualización permanente le ocupaba parte de su tiempo libre. Cuando se jubiló, tampoco le satisfacía el plan «un paseo, un café y una novela todos los días», por lo que tardó poco más de un mes en dedicarse a la cooperación social y al banco de alimentos.

LOS PREJUBILADOS DE BAZÁN

Percibieron el 76% del salario bruto, y muy satisfechos

La antigua Bazán de Ferrol, ahora Navantia, lleva despachados con jubilaciones anticipadas desde que comenzaron en 1986 a cerca de cuatro mil personas. Emilio Pantín Rodríguez, ahora con 59 años, dejó el astillero en la tanda del 2005. Los jubilados anticipadamente perciben un 76% del salario bruto y, en general, están satisfechos de su situación. Lo dice Pantín, que atiende muchos de los problemas de este sector a través de su sindicato, CC.?OO., del que fue dirigente. Porque, como muchos como él dice, «a levantarse a las seis de la madrugada pocos se acostumbran, aunque lleves muchos años». Tantos como 40, porque la gran mayoría entraron como aprendices con 16 años y poco después comenzaron a cotizar a la Seguridad Social. «Después de 40 años en el tajo yo creo que ya está bien», señala Pantín.

EL TRABAJADOR DE ENDESA

El plan minero fija unas condiciones excelentes

La central térmica de As Pontes se vio beneficiada por importantes ayudas de la minería, destinadas a prejubilaciones y la reindustrialización de comarcas mineras. A partir 1998 dejaron la central pontesa 1.240 empleados, dentro del Plan Miner. Al beneficiarse de la legislación minera, muchos salieron incluso con menos de 52 años. Endesa aplicó también un programa conocido como el ERE eléctrico , porque los fondos ya no procedían de la minería, que afectó a unos 350 trajabadores. Empleados de contratas se vieron beneficiados también, pasando primero como fijos a la principal. El salario les queda, a todos ellos, en un 94% a partir del tercer año de prejubilación.

EL CATEDRÁTICO

«Al jubilarnos nos queda menos del 50% del sueldo»

Los catedráticos de universidad se jubilan a los 70 años, con derecho a terminar el curso académico que estuviese en marcha. Pueden prorrogar su vida laboral a partir de esa edad y obtener la condición de eméritos, si bien para ello habrán de demandarlo y reunir al menos tres sexenios. Es el caso del catedrático de la Facultad de Químicas de la USC, Luis Castedo (1938). Cuando un catedrático se jubila le queda la mitad del sueldo, por eso el que más y el que menos estira lo que puede. «Nos queda menos del 50% y hay que tener en cuenta que muchas veces la gente tarda en entrar con buena posición de cotizante», argumenta Castedo, quien puntualiza que ahora para ser profesor titular «a lo mejor no llegas hasta los 40». Castedo subraya que a emérito no pasa todo el mundo, que depende de méritos acumulados, y que hay diferencias entre los contratos que se establecen en las universidades a la hora de reconocer esta figura, más primada en A Coruña y Vigo. Otra disfunción que advierte es que en la práctica casi da lo mismo cotizar 35 que 45 años, porque las diferencias a la hora de jubilarse serán escasas. Un catedrático jubilado ingresa 2.400 euros.

EL PEDIATRA QUE NO SE JUBILA

«No se debe interrumpir

el trabajo, a no ser que la persona esté disminuida»

Los médicos se jubilan a los 65 años, pero con frecuencia amplían hasta los 70 la carrera profesional, tras acreditar su capacidad funcional. Más allá de esta edad se pueden quedar en el despacho, normalmente si han ostentado jefaturas de servicio, y realizan, las más de las veces, labores de asesoramiento. Con frecuencia, si no abandonan a los 65 años la consulta, es porque carecen de suficientes años cotizados. Pero en este gremio hay notables excepciones, como la del pediatra José Peña Guitián (1926) que, con casi 84 años, se mantiene lúcido en activo en el Complejo Hospitalario Universitario de Santiago (CHUS), y ha formado, como docente, a miles de médicos. «Yo soy categórico, no se debe interrumpir el trabajo, a no ser que la persona esté disminuida de facultades o lo demande a voluntad propia, bajo determinadas condiciones», concluye. «Es evidente que la creatividad tiene una edad, otra cosa es el trabajo y rendimiento social», argumenta.

EL PROFESOR DE INSTITUTO

«Hai que deixar que entre xente nova no sistema»

Los profesores se jubilan a los 65, pero una normativa reciente les permite hacerlo a los 60 años. Si lo hacen, como ha pensado Luís Gómez, profesor de instituto en Culleredo, con 28 años de cotización, cobrarán la pensión máxima de 2.400 euros. «Esta profesión produce un desgaste moi grande e non é hoxe a mesma que hai quince ou vinte anos», advierte Gómez. El docente del Instituto de Culleredo rechaza el síndrome del quemado, pero cree que hay que dejar paso a nuevas generaciones de profesorado, más familiarizadas con las nuevas tecnologías. «É necesaria unha renovación de plantillas, porque o uso de ordenadores e das novas tecnoloxías está un pouco alonxado da nosa situación», sostiene. «Ademais hai un cambio profundo na profesión de docente, a escola perdeu en parte a súa función social e agora fai un pouco o papel de gardería», puntualiza.

EL CLERO

Los religiosos trabajan, como mínimo, hasta los 75 años

Todos los religiosos españoles permanecen activos, como mínimo, hasta los 75 años de edad. Y eso es porque aunque a los 65 pasen oficialmente a estar «jubilados», mantienen sus responsabilidades pastorales, cuando menos, durante otra década. «A día de hoxe -señalaba ayer un miembro de la jerarquía eclesiástica gallega- todo o clero cotiza á Seguridade Social. Tamén os membros das ordes relixiosas, incluso os das contemplativas [dedicadas fundamentalmente a la oración, y por tanto sin apenas ingresos], ás que a miúdo se lles axudou a cotizar desde as dioceses. Cando un sacerdote cumpre os 65 anos e comeza a cobrar a xubilación, vai deixando xa algunhas responsabilidades, pero non as pastorais». Los obispos, de hecho, no siempre abandonan la mitra a los 75 años. Antes de abandonar la silla episcopal, han de recibir el permiso del Papa.

LOS MILITARES

Retirados de menos de 40 años cuando se reducen los mandos

Cuando en las Fuerzas Armadas se produjeron procesos de reducción de mandos, pasaron a situación de retiro suboficiales y oficiales que en algún caso no habían cumplido los 40 años de edad. «Pero hay que tener en cuenta que eso fueron situaciones excepcionales», señalaba ayer un suboficial que se retiró a los 39 años de edad, precisamente acogiéndose a una de esas reducciones. En esos casos, como señalaba la misma fuente, la percepción del salario prácticamente no sufre variaciones al pasar a la situación de retirado. Una situación que, en cualquier caso, nada tiene que ver con la de «reserva», que en las Fuerzas Armadas suele ser una etapa transitoria y previa al retiro definitivo.

Como norma general, la edad de jubilación está fijada en España en los 65 años. No obstante, y pese a que muchos profesionales continúan trabajando hasta los 70 años, o en algunos casos incluso por encima, los españoles nos jubilamos de media a los 63 años y diez meses. La razón es la cantidad de trabajadores que abandonan la vida laboral a partir de los 50, en prejubilaciones de sectores en crisis o en períodos de reconversión, como la industria pesada, la banca o las telecomunicaciones.

En las últimas décadas, en Galicia hay casos para todos los gustos: desde militares que se retiraron antes de los 40 hasta médicos que siguen ejerciendo a pleno rendimiento a punto de cumplir los 84.