Xóvenes Agricultores cifra en 180 millones las pérdidas de los ganaderos por el desplome del precio de la leche

L. V.

ECONOMÍA

23 sep 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

Los productores de leche han perdido 180 millones de euros por la caída de precios en origen registrada en los últimos meses, según estimó ayer el sindicato Xóvenes Agricultores, que dio de plazo a las industrias hasta el 15 de octubre para que impulsen contratos homologados y apliquen el valor de referencia. El secretario xeral de la organización, Francisco Bello, reclamó al Ministerio de Medio Rural que actúe como garante del pacto firmado en Madrid en julio pasado, y que, en Galicia, se ha traducido en un número muy escaso de pactos que frenen la brutal caída de precios entre enero y agosto de este año y el mismo período del anterior.

Xóvenes Agricultores llamó la atención sobre el hecho de que, hasta la fecha, solo Pascual, Danone o Feiraco hayan suscrito contratos homologados, al tiempo que denunció que en estos momentos la materia prima se está pagando al precio más bajo de la historia en lo que se refiere a costes de producción. Y aseguraron que si el acuerdo se cumpliese, la leche se tendría que pagar a una media de «0,32 céntimos», estimó Bello, quien apuntó que «o prezo base en Francia son 0,29». Mientras esto no sucede, los ganaderos gallegos percibieron unos 25 céntimos por litro en agosto, aunque en algunas industrias el precio fue aún inferior. Esta cifra se sitúa diez céntimos por debajo de lo que se cobraba en el mismo período del 2008 y tres céntimos menos que lo que perciben actualmente los ganaderos de otras comunidades.

Xóvenes Agricultores volvió a trasladar ayer su convicción de que el acuerdo suscrito es válido si desde Medio Rural se presiona a industrias y distribuidoras para que este se cumpla y manifestaron su intención de desvincularse si no es así. Con todo, consideran que una huelga, como propone el Sindicato Labrego Galego, sería tirar piedras contra el tejado del sector, tal y como sostuvo Bello, quien reiteró las denuncias contra algunas distribuidoras que utilizan la leche como reclamo comercial, aprovisionándose de producto importado ya envasado, más barato que el nacional.

«Acabaremos a campaña con 150.000 toneladas menos», indicó Bello, que reclamó al Gobierno central que complemente las ayudas de la Xunta, que pueden llegar a un céntimo por kilo de cuota, con cargo al plan estratégico. A la Administración gallega le demandó que penalice a las industrias que no firmen contratos homologados a la hora de otorgarles subvenciones.