La refinería de A Coruña recorta su actividad al 80% al caer la demanda

ECONOMÍA

La crisis no ha afectado a los trabajadores, que emplean el excedente de horas en formación y mantenimiento

16 sep 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

La refinería de A Coruña trabaja desde hace semanas al 80% de su capacidad, debido a una caída en la demanda de productos petrolíferos que ha obligado incluso a parar parte de la producción en las instalaciones de la planta de Bens. Un portavoz de Repsol en A Coruña explicó ayer que la parte de la refinería que más está sufriendo la crisis es el «área de conversión», en concreto «la unidad de coque», que se encuentra parada. En el resto de los productos se trabaja a un menor ritmo, y Repsol ya cuenta con que apenas será capaz de cumplir un 80% de los objetivos fijados para el presente ejercicio.

Estas medidas no están afectando a los puestos de trabajo. La refinería coruñesa, uno de los principales empleadores de la ciudad, mantiene 620 trabajadores fijos y otros 400 que entran cada día en la planta procedentes de contratas. Eso sí, el parón de la unidad de coque y el menor ritmo en el que se trabaja en el resto de la fábrica han obligado a desviar empleos a actividades de mantenimiento y a cursos de formación.

La instalación coruñesa está dividida en dos grandes áreas, refino y conversión. En la primera, como su propio nombre indica, se obtienen productos petrolíferos acabados (gasolina, queroseno, gasoil) a partir de crudo importado. En el área de conversión se le da una segunda oportunidad a los metales más pesados, que se transforman en productos como el coque, un carbón procedente del petróleo. En la refinería no se atreven a valorar si la caída de la demanda obligará a reducir aún más el ritmo de trabajo o incluso a cerrar alguna unidad de refino. «Tenemos un problema de contracción de la demanda, al que se suma la caída de los márgenes internacionales, y lo que estamos haciendo es ajustar nuestra actividad a esa realidad», explica Ignacio Trapiella, portavoz de la planta.

Petronor, un 41% menos

El problema de Repsol en A Coruña se repite en el resto de las refinerías del sector energético español. Petronor, la filial vasca de Repsol que dirige el ex presidente del PNV Josu Jon Imaz, anunció el lunes una parada histórica de su producción, que afecta a una de las dos plantas de refino que tiene en la localidad vizcaína de Muskiz. La crisis ha afectado más a esta instalación que a la refinería de Bens. La compañía que preside Imaz ha reducido su actividad normal en un 41%.

La demanda de productos petrolíferos se ha desplomado por encima de los dos dígitos en el último año. Solo desde que comenzó el 2009, el consumo de gasolinas ha caído un 4,6%, (un 14,5% la sin plomo 98), el de gasóleos un 6%, el de fuel un 1,8%, mientras el de queroseno de aviación bajo un 15%. Todos estos productos se fabrican en la planta de A Coruña, que en el 2008 efectuó una inversión millonaria para incrementar su capacidad de refino.