La fusión frustrada de la Kutxa y la BBK desata un cruce de acusaciones políticas

N. Bore

ECONOMÍA

30 nov 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

La imposibilidad de materializar la fusión entre la Kutxa y la BBK ha desatado en el País Vasco un cruce de acusaciones políticas, ya que el PNV carga contra PSE, PP y la izquierda aberzale, responsabilizándolos de impedir la operación, mientras los demás acusan a los nacionalistas de pretender usar la fusión como mecanismo de control. El secretario general del PSE vizcaíno, José Antonio Pastor, declaró ayer que «era el control político del PNV y no la necesidad económica» lo que había impulsado «esta fusión amañada a dos», mientras que el presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, afirmó que la operación «ha fracasado porque al PNV le importa más el poder para la independencia que para el bienestar». La izquierda aberzale reclama un «nuevo modelo» de caja.