La espera media para cobrar las deudas contraídas por empresas que, como Martinsa-Fadesa, han iniciado un procedimiento concursal es de una media de dos años. Ese es el plazo estimado por fuentes del bufete de abogados madrileño Iure, experto en procesos de este tipo y que también se personará en el concurso en representación ya de unos sesenta compradores de inmuebles y una treintena de empresas proveedoras. La cifra de representados es solo inicial, ya que podrían añadirse más afectados.
Pese a todo, fuentes de ese bufete explicaron que los plazos podrían acortarse unos meses en este caso, ya que al parecer la compañía está trabajando en la elaboración de una propuesta anticipada de convenio de acreedores, un documento en el que se especifica la forma de pago en la que la empresa abonará la deuda. En este sentido, explicaron que en el supuesto de que el proyecto sea aceptado por los acreedores se acortarían notablemente los plazos de cobro.
Pese a todo, en el caso de una compañía con la envergadura de la liderada por Fernando Martín la elaboración de ese plan llevará un tiempo. Probablemente, comentaron desde el bufete de abogados, no esté presentado antes de un mes.
La única variable que podría demorar el proceso es, tal y como añadieron, que se realicen muchas impugnaciones como ha ocurrido en procesos como el de Afinsa.
La razón principal es que al presentar una impugnación porque alguno de los afectados no está de acuerdo con la propuesta se paraliza el concurso. En el caso de Fórum, por ejemplo, lleva paralizado ya en torno a un año por esa razón.
La ley prevé que en un proceso concursal a la empresa afectada únicamente puede rebajársele la deuda en un máximo de un 50%, mientras que la espera de los acreedores para cobrar no puede ser superior a los cinco años de plazo.
Lo habitual, tal y como explicaron fuentes de Iure, es que los pagos no se demoren más de tres años y la merma de la deuda ronde el tope del 33% del total.
Plataforma
Otro de los bufetes que ha creado otra plataforma de afectados es Escoda & Codina Advocats, aunque en este caso es en Barcelona. ?El objetivo de esta plataforma, tal y como informa la agencia Efe, es reunir al máximo número de consumidores que han comprado un piso a Martinsa-Fadesa, han realizado pagos a cuenta y ahora mismo desconocen si se les entregará su vivienda, tal y como ha informado el despacho de abogados.