José María Arias: «La era en la que se accedía fácilmente al dinero ha pasado a la historia»

ECONOMÍA

01 may 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

La crisis de liquidez y de confianza desatada en agosto por las hipotecas subprime ha sido «un punto de inflexión que marca un antes y un después» en la economía mundial, el cambio ha sido «esencialmente estructural» y ha provocado que «la era en la que se accedía fácilmente al dinero haya pasado a la historia». Con esta contundencia se manifestó ayer José María Arias, presidente del Banco Pastor, ante la junta de accionistas de la entidad, a la que presentó los resultados del primer trimestre, período en el que obtuvo unos beneficios de 141,1 millones de euros, un 167,3% que en el 2007.

Aislando la venta del 1,14% de Unión Fenosa, el resultado atribuido al grupo alcanza los 62,8 millones de euros, un 19% más. En ambos casos, el beneficio es el más abultado logrado por la banca gallega, que presenta, al igual que su homóloga española, un elevado grado de fortaleza, según destacaron tanto Arias como el consejero delegado, Jorge Gost. «Quiero destacar que la banca doméstica española no está contaminada por los activos de las hipotecas subprime , y que tiene unos ratios de eficiencia, rentabilidad y solvencia que la sitúan entre las mejores del mundo», afirmó el presidente del Pastor.

Ante los accionistas, José María Arias explicó que, pese a las acciones que han desempeñado los bancos centrales para asegurar el funcionamiento ordenado de los mercados, es necesario «todavía generar una mayor confianza. De hecho -afirmó- todo apunta a que las consecuencias de las subprime tendrán una duración de entre ocho y diez trimestres, lo que la sitúa como una de las crisis de mayor duración del pasado reciente».

Para el presidente del Pastor, su resolución pasa por «la adopción de nuevas medidas por parte de los bancos centrales y por la implicación de otros organismos que ayuden a paliar la creciente preocupación por los riesgos crediticios, puesto que los bancos centrales carecen de autoridad o capacidad para influir sobre los diferenciales de crédito, sobre el precio de la vivienda, la normativa contable, y un largo etcétera».

Los máximos ejecutivos del Banco Pastor, entidad que tras el BBVA ocupa la segunda posición en ratios de liquidez del sistema bancario español, destacaron que afrontan la actual situación de desconfianza en los mercados como «una oportunidad». Según los datos aportados por José María Arias, el banco se financia en un 71,6% con recursos de clientes, y el crecimiento del pasivo se equilibra con el aumento de la inversión. En los dos próximos años vencerán «únicamente 330 millones de euros, es decir menos del 10% de la financiación institucional». El presidente del Pastor valoró muy positivamente que, además, se disponga de una cartera de activos líquidos de entorno a los 1.500 millones de euros.

Crece la morosidad

De acuerdo con los resultados trimestrales, los depósitos de clientes alcanzaron los 14.280 millones de euros, lo que supone un aumento interanual de 2.598 millones, un 22,2% más, «prácticamente doblando la tasa media del sector». «El crecimiento de la inversión -añadió el presidente de la entidad gallega- fue incluso algo inferior, 2.496 millones, lo que demuestra la capacidad del banco para equilibrar el balance».

Arias, que destacó que el número de nuevos clientes se ha incrementado un 36% en un año, reconoció también que en un entorno de desaceleración económica como el actual «la morosidad ha empezado a notar unos inevitables síntomas de crecimiento, y la tasa de impagos evolucionó hasta el 1,26%, lo que supone un incremento de 0,44 puntos porcentuales respecto al último trimestre del 2007. Este aumento de la morosidad en la cuenta de resultados -explicó Arias- permitirá «anticipar» situaciones negativas y darles una solución más rápida que la que puedan ofrecer aquellas entidades de la competencia que opten por retrasar la visualización de los niveles de mora, que en su opinión irán incrementándose en el transcurso de los próximos meses.? De acuerdo con sus datos, la morosidad está afectando en estos momentos principalmente a las familias, mientras que el segmento del área de empresas no se está viendo, todavía, especialmente afectado por los impagos. No obstante, José María Arias explicó, es previsible que vaya empeorando», por cuanto que la crisis parece más profunda de lo que se estimaba en un principio y los problemas de liquidez no se resolverán a corto plazo.