El hombre de ACS en la eléctrica invoca a las raíces gallegas de la compañía para posicionarse en el concurso, a cuyo resultado condiciona la creación de empleo
06 abr 2008 . Actualizado a las 02:00 h.Pedro López Jiménez, presidente de Unión Fenosa, midió cada una de sus palabras en la entrevista. No quería molestar ni a Galicia ni a los gallegos, sobre todo cuando su empresa reivindica el 20% de la tarta eólica. Para lograrlo, la empresa recuerda el empleo, las inversiones y la actividad que genera en la comunidad a través de la eléctrica, R, Cedíe e Indra, entre otras.
-¿El futuro de Fenosa pasa por una fusión con Iberdrola, por un intercambio de activos con EDF o por...?
-El futuro de Unión Fenosa (aunque realmente en Galicia uno siente la tentación de hablar de Fenosa) pasa por el crecimiento y el desarrollo. Pero el futuro no está escrito, y las especulaciones respecto a movimientos corporativos pueden ser infinitas. No es un problema de difundir informaciones confidenciales. Si hay algún tipo de movimiento, será bueno para la compañía y para los mercados que atendemos. Unión Fenosa es objeto de deseo, por algo será.
-Son objeto de deseo y ustedes también desean. Ante una operación corporativa, ¿la marca Unión Fenosa prevalecerá?
-Lo deseo, me parece altamente probable, pero el futuro no está escrito.
-¿En qué horizonte estará concluido el mapa eléctrico?
-Depende de cuáles sean los equilibrios finales. Me parece improbable que estemos en una situación de especulaciones durante dos años.
-¿Ocurrirá una vez que se forme el nuevo Gobierno?
-Cuando no hay un Gobierno falta una pieza en el panorama. Es una condición necesaria, pero no suficiente. Este tipo de especulaciones en Galicia me parecen especiales porque, por su ambigüedad y sus conceptos flexibles, tienen un contenido muy gallego.
-¿Podría ser más concreto?
-Estamos en Galicia, y todo se pega. He aprovechado este viaje para, como objetivo fundamental, exponer a la Xunta el deseo de Unión Fenosa de mejorar nuestra participación en energías renovables con motivo del concurso público. Esta petición la he fundamentado en la profundidad de las raíces de Unión Fenosa en Galicia y en nuestro compromiso con ella, donde distribuimos el 85% de la electricidad de forma directa y un 10% de forma compartida. Esas razones deberían de puntuar en las condiciones para otorgar los parques. No somos una empresa que pasa por aquí y dice que aprovechando los concursos eólicos nos gustaría hacer algo.
-Quieren el 20% de la tarta eólica.
-Lo deseamos ardientemente.
-Para ello invocan a Galicia. Pero ¿qué gana la comunidad dándole esos megavatios?
-Podría extender lo mismo a qué gano yo con que Galicia siga contando con La Voz de Galicia. Los dos formamos parte de esta comunidad.
-Ustedes tienen monopolio.
-No. Unión Fenosa tiene el 90% de la responsabilidad de que los gallegos dispongan de energía en sus casas. A partir de ahí debemos aceptar la competencia en los términos en los que está regulada. Fenosa no es una empresa mayorista que pretende comerciar con la electricidad. Ese no es nuestro compromiso diario con este territorio desde hace muchísimos años.
-Pero su compañía parece cada vez menos gallega. La empresa habla de compromiso, pero quizá sea su responsabilidad distribuir la electricidad. El capital gallego ha ido reduciéndose desde que ustedes ampliaron su participación hasta el 45%. ¿En qué es gallega Fenosa?
-Soy fundador de la CEOE, así que me produce cierta satisfacción que se identifique una empresa con su capital. Cuando fundamos la CEOE no formaba parte de las creencias sociales en aquel momento. La relación de una empresa con su entorno trasciende al capital. Hemos hablado del compromiso y de las raíces. Es cierto que hace año y medio cerca del 25% del capital de la empresa estaba en manos de accionistas definibles como gallegos, lo que también sería discutible por su deseo de desarrollar su actividad en otros territorios. ¿Por qué esa participación es hoy inferior al 10%? Cuando tenían un 25%, se contaba con la presencia de Manuel Jove, que acababa de vender Fadesa en un ejercicio maravilloso de premonición. Sobre las instituciones financieras, ellas tendrán sus motivos [aclara que sus ventas son parciales], pero del capital de una firma cotizada se sale por no estar a gusto o necesitar dinero.
-Supongamos que EDF entra en su eléctrica. ¿No le parece ilógico que los embalses gallegos estén hasta el 2040 en manos de una firma francesa sin recibir nada a cambio?
-Me parece una pregunta tendenciosa. Si empezamos a recoger todos las suposiciones haríamos una lista inmensa de preguntas. Pero lo más cómodo sería preguntarse: ¿para qué vamos a hablar de suposiciones?. Como el presidente de La Caixa, Isidro Fainé, yo no pierdo el tiempo con casos hipotéticos porque tengo mucho que hacer con los reales. Me gusta la honradez intelectual. No se puede mezclar una hipótesis con afirmaciones de lógica o no lógica de temas legales.
-¿Unión Fenosa aumentará su empleo en Galicia?
-Sí, si logramos más eólica.
-Estas no crean empleo.
-En construcción no. Pero eso es rizar el rizo de la autarquía. Los nuevos equipos de Sabón tampoco están fabricados en Galicia. Mire, la crisis financiera actual está originando un parón en algo que era nuevo en la historia: como consecuencia de la globalización y de la comunicación instantánea, la formación bruta de capital fijo en el interior de una comunidad no era un factor esencial limitativo del desarrollo. La globalización financiera unida a la creación de condiciones jurídicas, de estabilidad y macroeconómicas en un ámbito determinado, permitía el crecimiento y el desarrollo económico con capitales viniendo de fuera. Irlanda ha tenido un crecimiento espectacular gracias a su apertura.