El eurodiputado español de Izquierda Unida Willy Meyer presentó ayer dos preguntas parlamentarias en la Eurocámara en las que pide a la Comisión Europea que se pronuncie sobre el conflicto de la planta de gas de Reganosa, que a su juicio «vulnera múltiples disposiciones legales, españolas y comunitarias» y representa «un gravísimo riesgo para la vida en la zona, para la riqueza pesquera de la ría y los puestos de trabajo que de ella dependen».
Meyer asegura que el proyecto de la planta incumple la zona de exclusión térmica obligatoria alrededor de sus instalaciones; subraya que las dimensiones de la ría de Ferrol no se adaptan a las recomendaciones de los expertos para la evacuación de emergencia de gaseros en peligro, y advierte que no se ha realizado el preceptivo estudio de impacto ambiental ni se ha consultado a la población. Meyer señala también que las características de la planta de Ferrol son similares a las de la factoría gasera que el Gobierno italiano acaba de cerrar en la ciudad Bríndisi, tras considerarla un peligro medioambiental, social y humano.
Además, el eurodiputado de IU recuerda a la Comisión que España ha sido condenada en sentencia firme por el Tribunal de Justicia de la UE por no trasponer correctamente a su legislación la directiva europea que obliga a realizar estudios de impacto ambiental en el caso de proyectos como el de la planta ferrolana.