Uruguay y Argentina rompen el diálogo para instalar dos plantas de celulosa, una de Ence

Agustín Bottinelli CORRESPONSAL | BUENOS AIRES

ECONOMÍA

08 abr 2006 . Actualizado a las 07:00 h.

?l Gobierno de Uruguay dio el viernes por terminadas las negociaciones directas con Argentina para resolver el conflicto por la instalación de las plantas de celulosa de las empresas Ence y Botnia. Esta última, de origen finlandés, se negó a suspender las obras por un período de 90 días, plazo que ambos Ejecutivos habían solicitado para poder elaborar un informe medioambiental. Por su parte, los habitantes de Gualeguaychú y Colón, las dos ciudades argentinas ubicadas en las orillas del río Uruguay que se verían damnificadas por la posible contaminación de las aguas, volvieron a cortar dos de los tres únicos puentes que unen ambos países. El canciller de Uruguay, Reinaldo Gargano, comunicó el cese del diálogo y aseguró que su país convocará de inmediato al Consejo del Mercosur para protestar por los cortes de los puentes y notificar de la situación a la corte internacional de La Haya. «El presidente uruguayo, Tabaré Vázquez, ha juzgado que la negociación en el ámbito de Gobiernos no ha dado resultado», aclaró Gargano. Todo estaba arreglado para un encuentro entre Kirchner y Vázquez cuando la empresa Botnia comunicó que sólo suspendería las obras por 10 días, entre los que se contaban siete de la Semana Turística -equivalente a la Santa en Uruguay-. Esta postura se tomó por una burla en Buenos Aires, que exigió a Tabaré Vazquez que impusiese su voluntad a la empresa y le hiciese cambiar su actitud. En respuesta, Uruguay decidió terminar las conversaciones. En Argentina, el canciller Jorge Taiana lamentó la «intransigencia de Botnia» y atribuyó a esa empresa el fracaso del acuerdo entre ambos países. Explicó también que recurrirá a la corte internacional de la Haya, pero para plantear el asunto de la contaminación de un río que es frontera entre los dos Estados.