La opa repartirá el sector eléctrico gallego entre Iberdrola y Fenosa

ECONOMÍA

La italiana Enel y la portuguesa EdP, ambas estatales, pugnarán por activos de Endesa

16 feb 2006 . Actualizado a las 06:00 h.

La bendición del Gobierno a la oferta pública de adquisición de acciones lanzada por Gas Natural sobre Endesa ha desatado las ansias de poder de las principales empresas españolas y extranjeras del sector, que empiezan a diseñar sus estrategias para hacerse con un atractivo paquete de activos de la todavía primera compañía productora de energía del país, y escalar así posiciones en el mercado eléctrico. En este duelo de titanes ya han anunciado abiertamente su disposición a pujar por los activos de Endesa dos de sus principales competidores: Iberdrola ?por medio de un acuerdo previo con Gas Natural? y Enel, la primera eléctrica italiana ?propiedad del Estado? y la quinta de España tras la compra de Viesgo. La vasca, en manos del BBVA y la Kutxa, tiene, de momento, todas las de ganar. El Gobierno nada ha objetado, al menos de forma expresa, al acuerdo entre Gas Natural e Iberdrola y, por tanto, tiene prioridad para quedarse con los activos de Endesa. En este sentido, el Ejecutivo socialista ha hecho caso omiso a las recomendaciones formuladas por la Comisión Nacional de la Energía (CNE) para que no fuese Iberdrola la que adquiriese las propiedades producto de la obligada desinversión. La CNE alertaba así de la posible creación de un duopolio en comunidades como Galicia, donde, efectivamente, el mercado de generación eléctrica quedaría en manos de Fenosa e Iberdrola. Además, la eléctrica vasca se convertiría en la primera empresa productora de energía de Galicia, consolidando su segunda posición en el ámbito nacional. Sólo la central térmica de As Pontes ?una de las propiedades de Endesa a la que aspira Iberdrola? genera el 35% de toda la electricidad que sale de la comunidad y es capaz de atender la mitad de la demanda de energía de los ciudadanos gallegos. La central es, como la calificó un experto en estas cuestiones de energía, «la gallina de los huevos de oro», una instalación valorada por la propia Endesa en 1.100 millones, y que, a pesar de consumir carbón, se le ha metido entre ceja y ceja a Iberdrola, una empresa que hasta ahora repudiaba a las térmicas y se abrazaba a las energías limpias. En esta dura pugna entrarán también Fenosa, Hidrocantábrico (Electricidade de Portugal) y Enel-Viesgo, tercera, cuarta y quinta eléctrica del país, respectivamente. La compañía controlada por ACS no ha movido ficha de forma clara, pero su consejero delegado, Honorato López Isla, ya ha adelantado que Fenosa adquiriría la parte de Endesa en Reganosa (21%) si fuese necesario para consolidar el proyecto de la planta de gas de Mugardos, uno de los activos que Gas Natural deberá vender por imposición del Gobierno. La regasificadora gallega tiene otro pretendiente en Enagás, que cuenta con los favores del grupo catalán, principal accionista de la propietaria del gasoducto español y de la plantas de gas. El Gobierno, en la condición número 16 que ha impuesto a la opa, dice así: «La enajenación de activos estará sujeta a la autorización previa del Servicio de Defensa de la Competencia, que valorará la idoneidad del comprador propuesto por Gas Natural atendiendo a los siguientes requisitos: ser un competidor existente o potencial, viable y sin vínculo alguno con Gas Natural; disponer de recursos financieros ajenos al vendedor y no crear nuevos problemas de competencia». Investigación de UE La comisaria de Competencia, Neelie Kroes, advirtió ayer que su departamento planea iniciar una campaña de investigaciones en el sector europeo de la energía en aquellos territorios en los que sospecha que pueden estar produciéndose prácticas contrarias a la libre competencia, informa Juan Oliver, corresponsal en Bruselas.