El Gobierno ve con buenos ojos la posible fusión de Ono y Auna

La Voz AGENCIAS | MADRID

ECONOMÍA

14 abr 2005 . Actualizado a las 07:00 h.

El Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero apoya decididamente las concentraciones en el sector de las telecomunicaciones. Francisco Ros, secretario de Estado que ?desempeña esta responsabilidad, reiteró ayer, durante su intervención en unas jornadas, su consideración «positiva» del proyecto de compra que prepara la operadora de telecomunicaciones y televisión por cable Ono para hacerse con el grupo de comunicaciones Auna, en su totalidad o en parte.? Las tornas han cambiado completamente en pocos meses. Si en noviembre del 2004 los accionistas de Ono rechazaron la oferta de adquisición lanzada por el grupo Auna por considerar insuficiente un precio de 2.400 millones de euros, ahora parece ser Ono quien, según fuentes del mercado, prepara una operación que podría abarcar la actividad de telefonía fija y banda ancha -de valor estimado entre 2.300 u 2.600 millones de euros- y también la del operador móvil Amena, valorado en unos 8.000 millones. Ninguna de las dos partes implicadas ha querido informar oficialmente. Accionista de referencia de Ono es Spaincom, un consorcio participado por Bank of America, la Caisse de Depot de Quebec y General Capital Services. Multitel controla el 20,65% y el SCH, también accionista de Auna, el 17,03%. El resto del capital está en manos de Ferrovial (9,26%) y Sodinteleco (9,1%). Los propietarios de Auna son el grupo Santander Central Hispano, con el 32,1%; Endesa, con el 32,9%, y Unión Fenosa, con el 18,7%. De ellos, el banco ha expresado en varios ocasiones que venderá «si le ofertan un buen precio», y para los analistas la operación constituye una oportunidad para que el grupo bancario eleve con rapidez su cuota de capital básico. En cualquier caso, si Ono acuerda finalmente hacerse con todo o parte de la operadora de telecomunicaciones que preside Luis Alberto Salazar-Simpson, debe llevar a cabo una ampliación de capital previa, con el fin de recabar recursos financieros, y algunos accionistas aprovecharán la ocasión para diluir su presencia, y deshacerse de su cuota, posteriormente. Atomización Durante su intervención, Ros explicó que el proceso de consolidación en la industria de las telecomunicaciones se hace necesario porque hay compañías «pequeñas y demasiado atomizadas». En este sentido, el secretario de Estado hizo hincapié en la necesidad de que las firmas del sector tengan una cierta dimensión, al señalar que «cuanto más grande sea la empresa resultante por tamaño y por variedad de servicios, mejor porque tendrá más posibilidades de competir».