Galicia crece a menor ritmo que España

ECONOMÍA

MARÍA VILLAR

El autor sostiene que la comunidad gallega se ha alejado de la media española por un menor avance de su economía

16 oct 2004 . Actualizado a las 07:00 h.

El 10 de octubre se publicó un informe de Caixa Galicia titulado Galicia crece al ritmo de España. El titular hablaba de presente, y sobre el hoy y el ayer de Galicia existe un amplio consenso, al cual, a diferencia de los autores de este informe, me sumo: Galicia se aleja de España. Incluso, alguna de las gráficas utilizadas por los firmantes, Ares y Pousa, fortalecen esa línea. Valga el ejemplo de la Tasa de variación interanual del PIB de Galicia y España. De un total de dieciocho trimestres analizados, Galicia supera a España únicamente en cinco no consecutivos y, con ese pésimo resultado, afirman que «Galicia está creciendo un poco más intensamente que el resto de España». Si hubiera sido un partido de fútbol, veríamos en el marcador: Galicia 5-España 13. Pero, si en lugar de haber jugado un partido de cuatro años y tres meses, el utilizado por los autores, analizáramos un tiempo algo mayor, podríamos ojear un informe del ICO de enero del 2004, que afirma: «Durante el período 1995-2002, el crecimiento real acumulado del PIB de Galicia (20,8%) ha sido inferior al del resto de España (26,4%)», indicando que Galicia, junto a Asturias y Castilla y León, son las regiones que menos han crecido de España. Aquellos que opinan que hay dos Galicias, deberían saber que, a juicio del servicio de estudios del ICO, «todas las provincias presentan un crecimiento acumulado menor a la media nacional». En términos nominales, el PIB de España creció en el período 1995-2001 un 48,8%. Para el mismo período, A Coruña creció un 42.5%, Lugo un 27,7%, Ourense un 38,3% y Pontevedra un 47,5%. ¡Tampoco por separado vamos bien! Pero, si crecemos menos, por algo será. El informe del ICO indica que el menor crecimiento real se debe básicamente al peor comportamiento de la agricultura, los servicios, la construcción (que si bien han experimentado un moderado crecimiento, dista del registrado en la media nacional) y la industria. En este partido, Galicia no muestra ni defensas, ni centrocampistas, ni delanteros, ni porteros superiores a la media nacional. En la carrera de la competitividad es necesario generar elementos diferenciales positivos y Galicia no parece haberlos desarrollado. Y sobre este último aspecto, al menos los autores de Caixa Galicia parecen mostrar una opinión similar. Indican que «el sector agrario en Galicia va a estar marcado por el estancamiento de la producción [....] La industria tampoco atraviesa una fase expansiva». Sobre la construcción opinan que, «comienza a mostrar síntomas de agotamiento», al referirse al comercio exterior señalan, «los notables aumentos de los últimos años no se están manteniendo...». Con nuestros antecedentes y un equipo, donde incluso Ares y Pousa reconocen que tiene tocadas sus filas, aventuran que «se mantienen las expectativas de que la economía gallega crecerá este año una décimas por encima de la media española». Esta tesis se sustenta en el crecimiento interanual del PIB para el último trimestre del 2003 y para el primero del 2004. Pero, al igual que la levadura puede elevar el volumen del pan, pero no su capacidad calórica, un incremento puntual de la inversión en infraestructuras puede modificar temporalmente nuestro PIB, pero no alterar nuestra estructura. Afirmar que Galicia crece al ritmo de España, tal y como lo entiende la ciudadanía y no un estadístico, implica demostrar que nuestro cuerpo económico se comporta mejor que el español. La convergencia Andar, andamos, pero, ¿cómo andamos? Indica el Índice FUNCAS de Convergencia Real para el período 1995-2001, que la economía de Galicia, debido al elevado ritmo de convergencia entre España y Europa, ha aumentado la convergencia respecto a la media europea. Mientras que la convergencia de Galicia respecto a la media española ha tenido un comportamiento errático, habiendo aumentado tan sólo ligeramente en el año 2001 con respecto a la situación de 1995. Es decir, ¡Galicia anda a remolque de España y por tanto, a trompicones!. Hasta los equipos que descienden, ganan algún partido. Crecer al ritmo de España y superarla, requiere una modificación estructural acompañada de un crecimiento más fuerte y regular que el español. Mientras eso no ocurra, no podremos afirmar que Galicia crece al ritmo de España. Venancio Salcines es profesor de la Universidade da Coruña. Pertenece a los comités editoriales y/o científicos de publicaciones como Investigación Económica, Momento Económico, Documentos de Trabajo en Análisis Económico, Revista de Educación Superior, Procesos de Mercados o Principios.