Las petroleras bajaron la gasolina al concluir la vuelta de las vacaciones

Mario Beramendi Álvarez
Mario Beramendi SANTIAGO

ECONOMÍA

Desde principios de verano, los carburantes se encarecieron el doble que el crudo Los precios de la 95 sin plomo y del gasóleo cayeron dos céntimos anteayer

02 sep 2003 . Actualizado a las 07:00 h.

?a política de precios de las petroleras sigue levantando múltiples sospechas entre los consumidores. Las empresas bajaron el lunes 1 de septiembre 0,02 euros los carburantes, después de que éstos alcanzaran en los últimos días de agosto sus precios máximos, justo cuando se produjeron en España más de cuatro millones de desplazamientos en coche como consecuencia de la operación retorno de las vacaciones. El litro de gasolina sin plomo de 95 octanos, el combustible de mayor demanda, estaba ayer en Galicia a 0,84 euros, cuando hace siete días superaba los 0,86 euros. Lo mismo ha ocurrido con el gasóleo de automoción, que ha pasado en el mismo período de 71,7 céntimos de euro a 69,3. Fuentes de Repsol indicaron ayer que esta evolución del valor de venta de los carburantes «no obedece a ninguna estrategia premeditada de negocio sino a la evolución del mercado del crudo, que apunta ahora a una leve estabilización en su cotización internacional». Desde la Asociación Española de Operadores de Productos Petrolíferos (Aope) insisten en que las empresas que comercializan carburantes pierden dinero con una cotización del barril de Brent en el entorno de los 30 dólares. La patronal sostiene que es un error establecer un paralelismo puro entre la evolución del valor del petróleo y la del precio de los carburantes. Argumentos Sin embargo, son las propias petroleras las que han justificado los cinco incrementos del valor de la gasolina este verano en las oscilaciones al alza del precio del barril Brent, que ayer, sin embargo, cayó casi dos dólares y se situó por debajo de los 28 dólares. Desde finales del mes de junio, los combustibles se han encarecido una media de cinco céntimos de euro por litro, una subida incluso superior a la que experimentaron como consecuencia de la pasada guerra de Irak. Es decir, que desde comienzos del verano, las gasolinas se han encarecido un 15%, mientras que el crudo sólo lo ha hecho un 7%. Fuentes del sector petrolero explicaron ayer a este periódico que el Gobierno, a través del Ministerio de Economía, ha vuelto a emplazar a las petroleras a que bajen sus precios porque la cotización actual del Brent no justifica esta escalada y porque el departamento que dirige Rato no está dispuesto a que la política de las empresas genere tensiones inflacionistas, una vez que los precios han empezado a bajar en España. Pese a que las petroleras insisten en que no existe ninguna coincidencia entre el final de las vacaciones y la bajada de la gasolina, lo cierto es que esta situación no es nueva. Durante la pasada Semana Santa ya se produjeron incrementos coincidiendo con los días de mayor tráfico. La evolución En lo que va de año, los precios de los carburantes han tenido una evolución que se puede concretar en tres fases: una primera, hasta mediados de marzo, en la que hubo sucesivas subidas como consecuencia de la guerra de Irak; la segunda, hasta el mes de junio, en la que hubo importantes descensos y una tercera, durante el verano, protagonizada por fuertes incrementos. Desde las organizaciones de consumidores emplazan al Gobierno a que investigue por qué existe tanta coincidencia en la evolución de los precios y advierten de que las subidas y las bajadas se producen de forma casi idéntica, lo que invita a pensar, según ellas, que puede haber pactos de precios. A esto se añade, además, que el mercado de los combustibles está dominado en España por pocas empresas, lo que reduce la competencia de precios.