El hotel Vía Argentum de Silleda se prepara para abrir en junio

Rocío Ramos LALÍN / LA VOZ

SILLEDA

Cedida

El turismo de interior empieza a despegar en la zona con mayoría de clientes gallegos

13 may 2021 . Actualizado a las 21:38 h.

El pasado noviembre el hotel Vía Argentum de Silleda decidía cerrar sus puertas a causa de la pandemia. Ahora, tras siete meses de parón, el cuatro estrellas silledense se prepara para volver a abrir. La directora del complejo, Katiuska Ramos, explica que «será del 1 al 15 de junio». En estos momentos se están llevando a cabo algunas obras en el hotel pendientes de algún material en concreto. De ahí que, explica Ramos, no puedan aún saber la fecha exacta, que podría ya concretarse la semana que viene.

Mientras, a través de la página web, el hotel ya admite reservas a partir del mes que viene. El regreso incluye la apertura de todos los servicios que lleva parejo el hotel y que abarca el alojamiento, el restaurante y las instalaciones del Spa. Katiuska Ramos explica que eso supone la reincorporación de todo el personal al hotel. En cambio, otros servicios, como el de eventos, aún tendrán que esperar. Ramos apunta que «queremos ir con calma y poco a poco, y queremos ser un poco cautos a este respecto».

En los establecimientos hoteleros de la zona confían en que la situación sanitaria mejore, sobre todo de cara al verano, y les permita trabajar ya con cierta normalidad. El fin del estado de alarma y las suspensión de la mayoría de las restricciones de movilidad hace que tanto en la hostelería como en los hoteles se esté notando ya un cierto movimiento, que en algunos casos ya es notable.

En el otro cuatro estrellas dezano, el Hotel Spa Norat Torre do Deza de Lalín, para este puente tienen casi completo el aforo permitido. Entre sus clientes, apuntan desde el establecimiento, se encuentran, muchas personas llegadas de distintos puntos de Galicia que aprovechan el fin de semana para realizar turismo de interior por la zona en familia. Son muchas veces padres con hijos o parejas que se quedan generalmente, indican, una noche o como mucho dos. A los gallegos, que siguen siendo el grueso de la clientela, se añaden, apuntan, algún que otro viajero procedente de otras partes de España.

Llegada de visitantes

En algunos establecimientos lamentan la lluvia prevista para este fin de semana en el puente de las Letras. A lo largo de los últimos fines de semana también se fue notando en la zona la llegada de personas de otras partes de la comunidad gallega, especialmente de la costa pontevedresa. Si ahora el turismo se limita al fin de semana, se espera que a medida que nos acerquemos al verano y a los períodos vacacionales, las reservas se extiendan ya también a otros días de la semana que no sean viernes y sábados.

El pasado año, el verano fue bueno para la hostelería y los hoteles de la zona y el de este se confía en que pueda ser mejor gracias al avance de la vacunación entre la población. Alguno también expresaba su preocupación por el efecto que pudiera haber tenido el «desmadre» que se vio en algunas ciudades para celebrar el fin del estado de alarma. Habrá que esperar a ver si puede ir instaurándose la vuelta a la normalidad.

Mesas más separadas y distancias

Los protocolos del día a día de prevención del coronavirus se reflejan también en la organización de los eventos. Adriana Abelleiro, del Pazo de Xerlís, en A Estrada, explica que tiene que haber más distancias entre las mesas. Se acabaron ya aquellas de mucha gente que interactuaba. Ahora son de menos comensales, de cuatro si no son convivientes. Y si los aperitivos solían estar en mesas juntas y dar pie a mucho acercamiento y mucha reunión. Ahora se colocan mesas separadas, a veces una por cada mesa del banquete para propiciar mantener la distancia personal de rigor,

Las bodas siguen al ralentí por falta de confianza en que la situación sanitaria las permita

Si los bautizos y, en estos momentos, las primeras comuniones arrancan con las primeras celebraciones, el mundo de las bodas está aún parado. La principal razón es el miedo de los novios a que la situación sanitaria o las restricciones cambien para ese momento y no puedan realizar este evento tal y como querrían. Muchos no lo tienen aún claro y evitan lanzarse prefiriendo seguir esperando.

Adriana Abelleiro del grupo Sala Grandín-Pazo de Xerlís, en A Estrada, explica que empezamos a finales de abril con el primer evento». Son, sobre todo, bautizos y comuniones, con grupos más pequeños de lo que era habitual antes de la pandemia y, apunta, de 20, 30 o 40 personas o alguna boda pequeña.

En estos momentos el Pazo de Xerlís ofrece ya todos sus servicios para todo tipo de eventos siguiendo los protocolos que marcha la prevención del coronavirus. Eso no impide, que se puedan seguir realizando actividades complementarias muy demandadas para este tipo de eventos, como son las actividades para niños en las Primeras Comuniones y siguiendo la normativa en vigor.

En cuanto a las bodas, Abelleiro, indica que «tenemos alguna que estaba para agosto y no lo ve claro y opta por esperar al año que viene». Otros establecimientos de la zona como es el Norat Torre do Deza en Lalín, oferta ya todos sus servicios habituales para todo tipo de eventos.

Ni en el hotel lalinense ni en el Pazo de Xerlís hay problemas de espacio. Las amplias instalaciones y salones de ambos permiten adaptarse a las necesidades de cada cliente guardando las distancias necesarias y con la seguridad garantizada.