Silleda amenaza con dejar la Mancomunidade do Deza

j. b. LALÍN / LA VOZ

SILLEDA

miguel souto

Taboada dejó sobre la mesa la compra de una excavadora

19 feb 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

La Mancomunidade Terras de Deza sigue sin enderezar el rumbo a pesar de las buenas palabras y el giro anunciado en la gestión que había evitado su posible disolución. Si hace unas semanas se insufló aire a este enfermo casi terminal, la realidad golpeó de nuevo a la institución en el pleno celebrado ayer. El presidente y alcalde de Vila de Cruces, Luis Taboada, dejó sobre la mesa la propuesta para pedir una ayuda a través del Fondo de Compensación Ambiental que permitiese adquirir una retroexcavadora de segunda mano.

Respecto a esa iniciativa, con coste previsto de 60.000 euros para comprar la maquinaria de los que el 80 %, es decir, 48.000 serían aportados por la Xunta y los 12.000 restantes por la Mancomunidade, nada se había hablado en junta de gobierno ni se contaba con documentación para su estudio. El alcalde de Silleda, Manuel Cuíña, se mostró muy crítico con esta cuestión e incluso llegó a plantear una posible salida de la entidad supramunicipal al constatar que el giro en la gestión quedó en agua de borrajas. Al final el punto se retiró y se analizará pedir esa ayuda para la retroexcavadora de la junta de gobierno. Ahora queda poco margen de maniobra, ya que el plazo para pedir esta línea de ayudas acaba el día 26.

En la sesión de ayer se aprobó la Conta Xeral 2019, con la abstención del BNG, mientras por unanimidad se aprobó incluir los remanentes del 2019 en el presupuesto del 2021. Son 10.750 euros del Concello de Lalín y 5.313 del de Agolada, que deben utilizar.