Los empresarios respaldan la gestión de su presidente, que personaliza Cuíña

P. V. LALÍN / LA VOZ

SILLEDA

M. souto

Una veintena larga firmó para que la directiva insista que el Concello traslade la nave

13 sep 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

El giro a lo personal dado por el alcalde de Silleda al conflicto por la ubicación de una nave municipal en Área 33 no encontró eco empresarial. Por contra los empresarios respaldaron al presidente del colectivo. No llevarán al asunto a los abogados porque conceden poder de decisión al alcalde aunque le reprochen éticamente que ignore acuerdos previos e ignore al colectivo.

Petición de audiencia y firmas

En dialogo con PP y BNG acordaron pedir hoy audiencia al regidor por ver si Manuel Cuíña reconsidera y se aviene a razones. Al tiempo, cerca de una treintena de empresarios desacreditaron al alcalde al personalizar el conflicto en el presidente y firmaron un escrito en el que la comunidad de propietarios de Área 33 reitera el «desacuerdo con la ubicación de la nave» y solicitan el cambio a la parcela 5 o a otras. Y, también firman que «facultan a la actual directiva para realizar las gestiones para el cambio de ubicación al considerar que hay otras más idóneas».

Los empresarios trasladaron ayer al PP y a BNG, representados por Ignacio Maril y Mateo Varela, respectivamente, todo el proceso en el que mantienen desencuentro con el gobierno local, su demanda de que no se sitúe la nave para tratamiento de residuos en el solar de la rotonda, que se respete el acuerdo firmado con la ex alcaldesa Paula Fernández para un centro con aulas y cafetería, además de mostrar los documentos remitidos por el regidor. Los partidos dieron respaldo a los empresarios considerando que debe haber cauces de diálogo y negociación. No parece el lugar más idóneo la rotonda para tratar residuos. Tras los pasos negociadores del colectivo pidiendo audiencia a Cuíña activarán acciones corporativas.

Carballo, a nivel personal, se reserva medidas por «tan graves acusaciones»

Juan Carballo separó ayer las acusaciones personales del alcalde de su papel como presidente del colectivo de Área 33. Cuíña le acusa de actuar bajo intereses personales y de orquestar una trama contra el gobierno municipal, con alusiones a favoritismo del PP con sus empresas cuando gobernaban los populares.

Carballo aseguró ayer, tras «ver en prensa las acusaciones personales que el alcalde vierte sobre mi persona y mi empresa», que no tiene problema personal ni con la alcaldía ni con el regidor «aunque Cuíña sí parece tenerlo conmigo y con mi empresa». Por eso, asegura que, tras las elecciones, «me reservo la facultad de tomar todas las medidas oportunas que correspondan ante tan graves acusaciones». Asegura que «no somos políticos, somos empresarios y deseamos que nuestras empresas y en particular la mía, Fundiciones del Deza, sigan funcionando independientemente de quién sea el próximo gobierno autonómico».