Los motores rugieron en Silleda

SILLEDA

El tercer Fórmula Rali do Cocido coronó a Yeray Lemes ante unos 3.500 aficionados

07 feb 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

Rugieron los motores en Silleda y gritaron las gargantas de los aficionados al mundo del motor que ayer se desplazaron hasta el recinto ferial de la Semana Verde para disfrutar con el tercer Fórmula Rali do Cocido. Bajo un cielo plomizo y amenazante que durante la mañana dejó caer algunas gotas de lluvia, se celebró el evento deportivo que marca el inicio de la temporada de motor en Galicia.

Una veintena de pilotos de primer nivel y con currículos atestados de éxitos ofrecieron un espectáculo aderezado por el olor a rueda quemada. Unas 3.500 personas (según los datos iniciales barajados por la organización) llegadas de toda la comunidad y de otros puntos de España se apostaron en los márgenes de un circuito de casi 700 metros ideado para conjugar espectáculo y velocidad. Los tiempos no eran lo importante, sino la conducció, pero había quién se preguntaba cómo pilotos como Luis Climent o Yeray Lemes eran capaces de aunar cronos de vértigo con trompos y filigranas que hacían vibrar al público.

En las gradas y los márgenes del circuito, gente de toda condición. Aunque abundaban los grupos de jóvenes, entre los aficionados se colaban familias completas, con bebés incluidos.

Para todos los gustos

No había unanimidad entre el público a la hora de decantarse por el piloto más espectacular, aunque en las gradas las grandes apuestas pasaban por «varrer para a casa». La veteranía de Manolo Senra convencía a una parroquia que ya parecía entregada de antemano. Levantaban aplausos las pasadas de Yeray Lemes, el BMW amarillo de Ponce, la conducción de Jaime Castro, o el Fórmula de Toño Varela, entre otros.

Luis Climent, que afirmaba que «para mi Galicia ya es casi como mi primera casa», abría de par en par los ojos de los aficionados, entre los que cada vez es mayor el número de seguidores de Iván Ares, un joven piloto al que algunos ya apuntan al número uno.

Los «cabeza de cartel», los mundialistas Markko Märtin y Philippe Bugalski también cumplieron. Los dos señalaron que eventos como el Fórmula Rali do Cocido sirven a los pilotos para aproximarse a los seguidores del mundo de las cuatro ruedas, y coincidieron a la hora de alabar a la afición local. «Ya me habían dicho que la afición gallega era de las mejores de España», apuntaba el estonio Märtin. Sin duda, la afición se mostró agradecida con cada trompo, aunque tenía muy presente en la memoria al protagonista de la pasada edición del Fórmula Rali, el italiano Gigi Galli. Y es que, como apuntaban desde el público, superar la espectacularidad, entrega y cercanía de Galli era misión imposible.

A la hora de decidir el nombre de los mejores de la tarde, fueron los propios pilotos los que adjudicaron los laureles al más espectacular. Yeray Lemes se granjeó el respaldo de la mayoría de participantes, que optaban a continuación por un triple empate entre Phillipe Bugalski, Samuel Lemes y Luis Climent.