Montoto insta a los vecinos a reclamar en caso de no tenerla y el BNG denuncia los problemas de los ciudadanos para conseguir acudir a una consulta en directo
30 jul 2021 . Actualizado a las 05:00 h.Los diferentes grupos políticos del Concello de Lalín estuvieron ayer de acuerdo en el pleno en la necesidad de que se refuerce la Atención Primaria dotando a este primer eslabón de la salud de más medios humanos y técnicos. También en la importancia de las consultas presenciales secundando la opinión del BNG expresada por su portavoz, Francisco Vilariño.
En lo que discreparon gobierno y oposición fue en el primer punto de la moción presentada por los nacionalistas. Vilariño reclamaba la atención presencial en el centro de salud y la concejala de Sanidade, Eva Montoto, afirmaba que «nestes momentos xa se recuperou á atención presencial» indicando que si se pedía una cita a través de la aplicación, sí que solo dejaba la opción de cita telefónica, pero si se llamaba al centro de salud o se acudía allí, los vecinos podían elegir si querían una cita presencial o una telefónica. Señaló que eso era lo que establecía el Sergas y que ese era el derecho de los usuarios animando a los que tuviesen algún problema a escribir y presentar en el propio centro una reclamación por escrito.
Francisco Vilariño rebatió a la concejala haciéndose eco de las quejas de muchos vecinos señalando que «os veciños agardan 10 días por unha cita telefónica» y que hay médicos dijo que no están dando citas presenciales, mientras que otros sí. Montoto insistió en que «as axendas están abertas e teñen a obriga de atenderte». Al igual que el BNG, los representantes de PSOE y Compromiso por Lalín pusieron sobre la mesa los problemas que sufren los vecinos a diario derivados de la falta de atención presencial y las demoras de muchos días para pedir cita. La corporación coincidía en la importancia de la atención presencial y en que no se debía haber parado en la pandemia. Ahora, que todos los sectores y todas las empresas estaban otra vez en marcha no entendían como seguía habiendo estos problemas poniendo en evidencia las dificultades de obtener un diagnóstico adecuado a través de unas fotos por ejemplo para un problema de piel o por teléfono en muchos otros casos y patologías en los que se exige ver al paciente.
Teresa Varela, de CxL apuntó que «non se entende que non se corrixa na web a posibilidade de acceso a atención presencial e para chamar ao centro de saúde tes que chamar reiteradamente». Alba Forno, del PSOE, estaba de acuerdo con lo que decían sus compañeros de oposición que en Lalín «hai médicos que che dan cita presencial para unha consulta e outros non». Los ediles se quejaron también de la saturación que viven los profesionales, sobre todo, en esta época del año en la que no se cubren vacaciones ni bajas. La moción fue aprobada con los votos a favor de los grupos de la oposición y la abstención del PP que defendía que la atención presencial estaba restaurada. Vilariño propuso como reto que tanto el como la concejala llamaran al centro de salud para ver si les daban a elegir cita presencial o no y el alcalde, José Crespo, opinaba que después del pleno podrían probar todos a hacerlo para constatar lo que estaba pasando.
Algunas de las farmacias de la zona empezaron ya a expedir certificados de test de antígenos
Ayer algunas de las farmacias de la zona empezaron ya a supervisar en el propio establecimiento los test de antígenos y a facilitar los certificados que permiten a quien lo haga, y dé negativo, acceder a los locales de hostelería. Hay también farmacias que no se adhirieron a esta posibilidad y alguna que ayer, aún no tenía claro como tendría que actuar.
La emisión de certificados está pensada para los que aún no están vacunados, ya que si sí lo están, podrían acceder ya a los locales mostrando la acreditación de que tienen la pauta completa de vacunación. De ahí que las farmacias puedan emitir estos certificados para los que se hagan la prueba en la botica y tengan entre 13 y 35 años. Ayer en la farmacia de Rodeiro señalaban que ya habían supervisado la realiza, pero había sido, de momento, a petición de los clientes que eran personas de más edad y, por tanto vacunadas, y a las que no tenían que expedir certificado.
En la farmacia de Oca ayer ya habían hecho un par de ellos. Explican que «el proceso es sencillo y le pedimos el DNI y la tarjeta sanitaria para verificar que son quien dicen ser y ellos firman un consentimiento por protección de datos para permitir que podamos notificar el resultado al Sergas». En Lalín y A Estrada ya se habían emitido algunos.