Vilariño llama a concentrarse para «pedir o desconfinamento da sanidade pública» de Lalín
LALÍN
El concejal del BNG de Lalín, Francisco Vilariño, hizo un llamamiento a la participación en la concentración abierta que la formación convoca mañana sábado a las 12 horas en la Praza da Torre para «pedir o desconfinamento da sanidade pública» de Lalín, esto es, para reclamar la recuperación de la atención presencial en el centro de salud. Lo hacen por las graves consecuencias de limitar la atención a consultas telefónicas.
Un modelo que considera que no es temporal por el coronavirus, sino que es que el PP pretende que se asiente: dice que de lo contrario no se explica que la atención telefónica continúe hoy como hace un año, cuando ahora los profesionales están vacunados contra el covid-19. Vilariño entiende una atención telefónica para cuestiones como renovar recetas, bajas médicas o saber resultados de analíticas, «pero avaliar a situación dos pacientes require atención presencial, sen a que é imposible acadar unha atención de mínima calidade». La consecuencia real de la situación es la saturación de las urgencias, tanto en el centro de salud como en el CHUS.
El BNG sostiene que la actual situación agrava la ya precedente, en que el centro de salud lalinense «non era un referente de atención de calidade», pagando las consecuencias de los recortes del PP con merma de especialidades, personal medios y unas instalaciones obsoletas: «A pandemia fixo que colapsara», haciendo que los vecinos con recursos busquen la alternativa de la sanidad privada, y viendo otros cómo se agravan sus patologías, como les relatan. Vilariño insta a reforzar la atención primaria con más personal, rebajar listas de espera y evitar que por no cubrir bajas o vacaciones en lugar de 10 médicos pueda haber días con 4, 5 o 6. Apuntan a la movilización social de mañana tras rechazar el PP en Concello y Parlamento esas demandas.
Acusó a Crespo de anteponer el interés del PP al vecinal, e intentar desmovilizar a la población ante una concentración que si triunfa obligará a la Xunta a cambiar su posición, cree.