Un total de 1.390 vecinos de las comarcas de Deza y Tabeirós-Terra de Montes participaron durante la primera semana de implantación en el macrocribado a través de test de saliva dispensados de forma gratuita en las farmacias locales. En el cribado colaboran 35 de las 37 farmacias de la zona. Solo una de Lalín y otra de Cruces han quedado fuera del programa.
Por concellos, en el que más test se hicieron fue en el de Lalín. Las ocho farmacias participantes en el programa despacharon 441 test. En A Estrada, las once farmacias locales suministraron 357 kits y en Silleda fueron 210, repartidos en las cuatro oficinas de la localidad. En Cerdedo-Cotobade fueron 184, en Vila de Cruces -con tres farmacias participantes- se hicieron 97 test, en Rodeiro 42, en Forcarei 34, en Dozón 13 y en Agolada 12.
El programa de pruebas de detección del coronavirus desde las farmacias de la provincia de Pontevedra ya ha permitido diagnosticar 30 casos de covid-19 en toda la provincia, según informó la Xunta este miércoles. Hasta el momento, se han analizado 15.040 muestras de personas asintomáticas que han acudido a una botica y lo han solicitado.
El programa es gratuito y permite que los ciudadanos de entre 40 y 64 años se sometan a una PCR voluntariamente. Se les entrega en la farmacia un tubo para que recojan saliva en su domicilio, nada más levantarse y en ayunas. Después, la llevan a una oficina de farmacia. Los tubos se trasladan al Hospital Álvaro Cunqueiro y se procesan mediante el sistema pooling, una técnica que permite agrupar las muestras de 20 en 20 para hacer una PCR: cuando el resultado es negativo significa que todas las muestras lo son; cuando es positivo, entonces se analizan de manera individual.
Son casos que no se habrían diagnosticado de otra manera y entonces podrían estar generando brotes. Las pruebas se hacen a quien lo pide, siempre y cuando no se haya hecho otra PCR en los últimos quince días y no haya tenido el covid en los últimos tres meses. Solo se hace en personas asintomáticas.