El Balonmán Lalín incorpora al lateral izquierdo Agustín Franco

Javier Benito
javier benito LALÍN / LA VOZ

LALÍN

miguel souto

Afronta su primer destino fuera de su país, tras jugar en el Argentinos Júnior

26 ene 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

El Balonmán Lalín presentó ayer a su segundo refuerzo de la temporada tras la incorporación hace unas semanas del portero Tomás Villarroel. De nuevo llega procedente del otro lado del Atlántico. Agustín Franco Labartete cubrirá el hueco dejado por el lesionado José. Llega desde el Argentinos Júnior, donde desarrolló hasta ahora su carrera deportiva desde el 2003. Con 25 años, 1,78 metros de altura y en torno a los 78 kilos de peso, juega de lateral izquierdo o central.

El director deportivo del club rojinegro, José Antonio Varela Pincho, reconocía que llevan tiempo trabajando en su incorporación. Los fichajes habían quedado aparcados ante la posibilidad de que no hubiese competición y, una vez iniciada esta, la buena dinámica del equipo mantuvo esa posibilidad en cuarentena. Pero de nuevo se volvió a sondear el mercado por la ausencia de José, puesto que cubre Pachi, que también llegó de una lesión, junto con Pedro Toimil, un jugador aún en período casi de formación y adaptación a la categoría.

Pincho resaltó que Agustín Franco lleva fichado ya mes y medio, pero por cuestiones de visados y covid-19 se complicó su viaje desde Buenos Aires. Estaba previsto que llegase a principios de enero, para afrontar ya con el equipo las semanas de parón navideño e irse adaptando a sus compañeros. Pero al final recaló en Lalín este sábado. El director deportivo rojinegro cree que se incorpora en un momento propicio, encontrándose en buena forma física al haber estrado entrenando con el Argentinos Júnior aunque le resta competición y partidos. Ya se cursó la baja de José y se espera contar con el tránsfer para que el nuevo lateral izquierdo pueda estar disponible en el próximo partido. Pincho cree que se trata de una de las mejores opciones del mercado y que puede aportar lo que se necesita en estos momentos. Además, dejó abierta una posible sorpresa en cuanto a un fichaje más gallega «moi grato para todos de darse», aunque ahora ya tienen copadas todas las fichas.

Agustín Franco destacó la seriedad del BM Lalín para decantarse por venir, con muy buenas referencias y también de Pablo Cacheda tanto como jugador como ahora de entrenador. «Quiero aprender mucho y los desafíos me encantan; se trata de un club serio en los pagos pero sobre todo me gustó el trato que han tenido desde el principio conmigo y la cercanía», dijo para explicar su decisión de dejar su país. Ensalzó el esfuerzo de sus compañeros para lograr el empate ante el Novás. Con el Argentinos Júnior estaba desde el 2018 en la máxima categoría del balonmano de este país. Le gusta tanto defender como atacar, sobre todo correr, y el juego con el pivote.

Pablo Cacheda animó en el último tiempo muerto a darlo todo ante el Novás e igualaron

El punto cosechado ya con el tiempo cumplido por el Balonmnán Lalín ante el Atlético Novás lo recibió con la lógica alegría también el entrenador, pero hizo una lectura distinta a la euforia desatada en redes sociales. Pablo Cacheda ponía ayer el acento en el último tiempo muerto pedido con 25-29. «Falei tan só de que estábamos tirando o partido e que desen todo o que tiñan dentro, que parecían xogar co freo de man posto», apuntaba el técnico. Provocó esa reacción, unida al bloqueo quizás más mental que físico del Novás, que llegaba tras dos derrotas consecutivas, para alcanzar el empate. La presión o los fantasmas previos penalizaron al conjunto de O Rosal, que estuvo muchos minutos sin anotar.

La buena actuación de Tomás Villarroel bajo palos, en especial en ese último tramo decisivo, tuvo mucho que ver con el punto cosechado junto al acierto anotador de Roberto Álvarez. Cacheda destacó el mérito del portero argentino, incidiendo en que su papel le aportará confianza tras su buen porcentaje de acierto. No en vano jugó todos los minutos del choque.

Pablo Cacheda apuntaba que el partido discurrió como esperaba, costándoles en especial en el arranque de cada período entrar en la dinámica de juego ante un rival prácticamente profesional. No estaba marcado como obligatorio para ganar en el calendario y tampoco estaban, dijo el técnico, al 100 % a nivel físico. Incidía en que faltó la ambición necesaria para ganar este tipo de partidos.