El PSOE de Lalín cree que 2020 confirmó la incapacidad de gestión del gobierno local
LALÍN
Los socialistas de Lalín hicieron balance del 2020, que en palabras de su portavoz Román Santalla «confirmou a incapacidade do goberno para xestionar Lalín e a volta do Crespo máis despótico, antidemocrático e avinagrado». Ven al ejecutivo local carente de proyecto para el Concello, y pese a «sobrarlle o diñeiro, a duras penas foi capaz de ir sacando as actuacións que lle deixou feitas o goberno anterior». Considera Santalla que dicen una cosa y hacen la contraria, pero antes de reconocerlo siembran discordia y culpan de todas sus problemas y falta de ideas a la oposición. Señala así que el alcalde da lecciones sobre qué hacer en la pandemia y luego se salta la normativa para comer en Cruces.
Dijo que pese al revisionismo del PP actuaciones del 2020 como campo de Vilatuxe, Praza da Vila, pavimentaciones en el rural, Cinto Verde, actuaciones en Lalín de Arriba o pasarelas verdes corresponde a la gestión del anterior gobierno: «Crespo vende moito fume, pero acción real hai moi pouca. Neste ano non cumpriu nin a primeira das súas promesas máis electoralistas, mentre segue a patinar en todos os temas que administrativamente requiren unha xestión máis complexa».
Acusa Santalla a Crespo de un permanente ataque al Estado, al tiempo que presume de los 8 millones de euros que recibe a través del IDAE para mejora de iluminación pública. Añade que sucede lo mismo con la Diputación: critica pero alardea sobre proyectos del plan Concellos. Y concluye que no logró un euro más de la institución provincial del que ya corresponde a Lalín.
Sobre CIS y polígono Lalín 2000, el socialista dice que la Xunta retrasó ambos proyectos el pasado mandato para que no se asociasen al cuatripartito. El PSOE vigilará que exista avance real, y echa en falta la nueva ambulancia, medidas de empleo o remate de parcelarias.
Sostiene Santalla que en 2020 el PP solo sacó a trancas y barrancas el contrato del SAF, sin saberse nada de la iluminación o el agua, pero tampoco de los simples como pellets o reparación de maquinaria, solventables con copia-pega de los contratos vencidos. Apunta el abuso de contratos menores, y de miles de euros en facturas reparadas en cada pleno.
El portavoz socialista manifiesta que el pasado año sirvió para corrobar que está de vuelta el Crespo más totalitario y antidemocrático: «Dende a oposición e, especialmente dende o PSOE, sempre mantivemos un trato respectuoso e un talante construtivo co goberno, pero a resposta do alcalde é o despotismo coa oposición e o desprezo absoluto en particular cara a miña persoa». Anuncia que no lo permitirán y «responderemos coa mesma moeda». Apunta total falta de transparencia al responder preguntas plenarias, tomando el pelo a la oposición. Santalla cree que 2020 solo fue positivo para el gobierno del PP que, sin empatía con la ciudadanía «encheu o peto con 330.000 euros en soldos a políticos e asesores» que sumando retribuciones a populares sin dedicación eleva a 425.000. Lo contrapuso a «os 26.000 euros aos que renunciou por responsabilidade a oposición». Criticó medidas tardías frente al covid-19 y cómo recularon con la tasa a plásticos agrícolas.