Quejas por la renuncia, la primera vez en democracia, a presentar un presupuesto, del «preocupante» nivel de inversión del Edusi y la reducción de subvenciones
27 dic 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Después del balance de la gestión del gobierno realizada por el alcalde de Lalín, Rafael Cuíña, ayer le tocó el turno al PP. El portavoz popular, José Crespo, hacía un repaso del año considerando que «estamos a asistir aos últimos estertores dun goberno dividido e cun proxecto non definido» y que ahora «a preocupación do alcalde e concelleiros é a súa propia supervivencia política». Acusa al gobierno de ser «inoperante» y reforzar su estrategia de «moitos anuncios e poucos feitos» y cree que «Lalín está a perder oportunidades polos líos provocados polo alcalde». Para el PP, el 2018 fue el año «no que o caciquismo se consolidou» aludiendo al «incremento de contratos menores a afíns, facturas reiteradas reparadas, o escándalo das facturas devoltas da RPT e dos seguros». Cuestiones que, entiende, «van máis alá dunha mala praxis».
Indica que es la primera vez «na democracia» que el gobierno renuncia a presentar un presupuesto, recordando que a principios de año a preguntas del PP el regidor apuntó que había dado órdenes para su elaboración, con lo que supone que «ou non llo fixeron ou non se puxeron dacordo». Señala que «non fai falla ter maioría absoluta para aprobalo» y que «igual se podía haber negociado como o dos remanentes». Acusa de «incapacidade» al gobierno en el puente de Bustelos, los dos años para arreglar la sala Tuno Valdés, la demora en la reparación del edificio de la UNED o la falta de profesores de trompa y trompeta «que lle fai moito dano ao conservatorio».
El portavoz popular añade «os máis de 400.000 euros perdidos en subvencións, algunhas porque nin sequera as pediron», y el inicio de las obras de la rotonda de Donramiro sin los permisos. Incidió en los fondos Edusi y considera que el nivel de inversión es «baixísimo en comparación coa A Estrada». Cree que «vai comprometer a execución de moitos proxectos» y que en tres años solo contrataron «asistencias» y proxectos «tremendamente caros».
Contrataciones «sospeitosas»
El PP dice que está analizando «contratacións sospeitosas».En relación a los fondos europeos pone como ejemplo el de A Estrada, que está empleando mejor el dinero. Como ejemplo pone los cerca de 1,5 millones que invertirán en colocar iluminarias led apuntando que cuando lo miró el PP le costaba el cambio a este tipo de luz en Lalín 1,5 millones de euros y que en cinco o seis años se recupera el dinero con el ahorro que supone su uso.Afirma que «si antes Lalín era punta de lanza, agora hai outros concellos que nos están a adiantar mentras en Lalín todo vai despacito». Afirmó que con el PP «isto non pasaba».
Acusa al gobierno local de no haber sido capaz de ejecutar gran parte del presupuesto del 2017, de ahí «eses remanentes tan elevados». Para Crespo, «non é normal que unha cantidade tan importantísima dese orzamento que fixeron eles mesmos non se executase» y explica que «a baixada de débeda estaba obrigado por lei». En cuanto al paro, indica que sí bajó en Lalín «igual que en toda España cando se empezou a saír da peor crise da historia», pero que porcentualmente bajó más en A Estrada, «que non ten o tecido industrial que temos nos». Indica que A Estrada «pasou a liderar o ránking por renta per cápita e lle están facendo un centro de saúde».
Aludió al congreso «exemplar» celebrado por el Partido Popular en el que se eligió cabeza de lista por unanimidad para los comicios del 2019. Cree que «supemos está o caron dos problemas da xente», apuntando que el partido se estuvo reorganizando de cara a unas elecciones municipales en las que esperan «recuperar a confianza dos lalinenses».
Racso y la atención al rural
Crespo espera que el Concello aclare si presentó alegaciones a la petición de vertidos de Racso y pedirán explicaciones en el pleno. Recuerda la denuncia contra el PP en el juzgado y resaltan que si ellos tienen que acudir a la vía judicial fue el gobierno el que abrió la espita. Tilda a Cuíña de «alcalde ególatra, desnortado e para nada de fiar»; a González Casares de desempeñar el papel «de cuñado cómplice», a Lara Rodríguez se seguir «sumando bagaxe como peor concelleira de Cultura da historia». Cree que el edil del BNG va por libre «e terá que dar explicacións das vallas», anunciando Lalín que -cree- «están moi ben nas cidades, pero polas en Lalín ou en Deza é tirar os cartos porque son veciños e xa o coñecen».
Respecto al rural señala que el interés que dice prestarle Cuíña es una falacia y que el apoyo del PP permitió inversiones que aún se quedan cortas recordando que en el último gobierno popular invirtieron 4 millones de euros.