El BM Deza solicita organizar la Copa Federación en Lalín

Javier Benito
javier benito LALÍN / LA VOZ

LALÍN

MIGUEL SOUTO

Pincho ensalza la implicación de la plantilla, que permitió subir

27 abr 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El Balonmán Deza quiere ponerle la guinda al pastel de su excelente temporada, con ascenso ya conseguido, y organizar en Lalín la Copa. Ya cursó la petición a la Federación Galega de Balonmán y está pendiente de respuesta. Una competición que tiene fechas y enfrentamientos ya definidos. Será los días 12 y 13 de mayo, con semifinales entre Campus Ourense y Chapela por un lado y Pontedeume y BM Deza por otro.

Con el ascenso a Primera Autonómica ya conseguido a falta de dos jornadas, toca reflexionar sobre una temporada que está ya en su recta final. José Antonio Varela Pincho cogía las riendas del equipo, en su primer año al frente de un equipo sénior tras una dilatada trayectoria en los banquillos de base del Lalinense. Destacaba la experiencia y que «todo saiu perfecto, nin por asomo que íbamos a levalo así de ben, pero sabía que podíamos ser competitivos».

A la calidad de la plantilla solo faltaba contar con su implicación y esta fue máxima, como incidía Pincho, facilitando las buenas dinámicas de juego y resultados. Otros factores favorables fueron las pocas lesiones y el calendario, sin enfrentamientos ante rivales directos en la recta final de la liga y cuando ya se hace más complicada a nivel físico. Ellos los tuvieron principalmente en febrero, todavía en un buen momento en ese aspecto.

El BM Deza cuenta esta campaña con dieciocho fichas, tras haber dos bajas entre los veinte jugadores iniciales. A ellos se sumaron otros en entrenamientos que permitieron mejorar las sesiones, con nombres como Efrén, Nando, Carlos, Aller, Currás o Borja. Pincho además introdujo este año no solo entrenar tres días a la semana sino también trabajo físico con pesas.

Con dos partidos prácticamente de trámite en liga -este domingo en la cancha del Chapela será el penúltimo a las 12.30 horas-, tras el título de Segunda Autonómica y el ascenso ahora se redoblarán esfuerzos para preparar a fondo la Copa. Y con la ilusión de que se pueda jugar en Lalín. Después tocará descansar y planificar una nueva temporada en la que estarán seguro en Primera, «algo que non é negociable porque somos filial do Lalinense». El BM Deza debe ser el trampolín para las jóvenes promesas del balonmano local antes de poder saltar al primer equipo.

Pincho cree que tocará reforzar recursos, tanto económicas como humanos, para afrontar la nueva temporada. Aunque todavía queda tiempo podría repetir como entrenador del BM Deza, donde recaló este año como reconoce porque por motivos laborales le encajaba mejor que seguir con la base en el Lalinense.