Una condena unánime a la que se suma la rabia, el dolor y la indignación

R. Ramos / R. García LALÍN / LA VOZ

LALÍN

miguel souto

Unas doscientas personas se concentraron en Lalín para exigir responsabilidades

17 oct 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Unas doscientas personas acudieron ayer en Lalín a la llamada del Comité de Defensa do Monte Galego que reunió frente a la estatua de Loriga a unas 200 personas en protesta por la política forestal y bajo el lema «Lume, nunca máis. O noso monte importa». El colectivo pidió la dimisión de Feijóo, la conselleira de Medio Rural y el secretario xeral de Montes denunciando «a incompetencia manifesta» de la Xunta. Reclaman acciones de coordinación de las fuerzas contra incendios, planes de restauración de las zonas afectadas o una fiscalía con medios técnicos y económicos para luchar contra el fuego, destacando la profesionalidad y abnegación de los trabajadores forestales.

En el Concello de Lalín tuvo lugar al mediodía una concentración en la que González Casares leyó, como alcalde en funciones un manifiesto contra los incendios. Asistieron concejales, el portavoz del PP, trabajadores municipales y el conselleiro de Cultura, Román Rodríguez que recorrió las zonas incendiadas de Lalín, Agolada, Silleda y Forcarei, en algunos casos acompañado por los responsables municipales de cada concello, hablando con brigadistas y vecinos.

Leandro Quintas, de Usag, se sumaba a la condena de los incendios y pedía Rajoy «que teña un detalle con Galicia» demandando ayudas para los familiares de las personas fallecidas y para aquellos que perdieron sus propiedades.

En Lalín, el concejal no adscrito, Juan José Cruz, presentó una moción demandando al gobierno local un plan municipal para dotar de zonas adecuadas para almacenar agua a todas las parroquias. Pide que se inste a la Xunta a profesionalizar los servicios contra incendios y a realizar programas pedagógicos de concienciación en los colegios, que solicite ayudas para crear retenes y que el Concello inste a los vecinos a cumplir con la limpieza de fincas. En la zona los vecinos se quejaron de que había sitios donde no podían entrar ni los tractores. A la condena de los incendios se sumaron también en otros concellos de la zona, donde afortunadamente se libraron del fuego en esta ocasión.

En Lalín, el portavoz del PP, José Crespo, subrayaba que «entre todos debemos buscar solucións a un problema que a nosa terra arrastra fai décadas e que de xeito cíclico amosa a súa faciana máis virulenta». Al igual que Ana Luisa González en Silleda y otros responsables municipales de la zona, Crespo se quedaba con la solidaridad demostrada por el pueblo gallego.

Desde Argentina, el alcalde de Silleda, Manuel Cuíña, pasaba la noche en vilo para contactando con los afectados en un concello donde los restaurantes y los particulares se ofrecieron poniendo casa y negocio a disposición de los vecinos afectados por el fuego.

La calle fue un clamor y las voces eran unánimes condenando los incendios, destacando la solidaridad vecinas, el esfuerzo y llenando los muros de las redes sociales con muestras de dolor, rabia y la indignación tras una nueva jornada negra,