Rafael Cuíña cree que el PP perdió la censura aunque no la presentó

Javier Benito
javier benito LALÍN / LA VOZ

LALÍN

miguel souto

Niega parálisis del Concello y falta de relevancia ante otras administraciones, animando a Crespo a evaluar si debe dimitir en la política local tras perjudicar a los vecinos

28 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El alcalde de Lalín, Rafael Cuíña, actuó ayer como portavoz del gobierno local para valorar la decisión del Partido Popular de no presentar moción de censura, cuyo plazo expiraba mañana. Los populares lo habían anunciado este lunes entre críticas a la parálisis municipal, considerando que el cuatripartito debía ponerse a trabajar para no perder otros dos años. El regidor lalinense fue contundente al considerar que el PP ha perdido esa moción de censura no presentada, invitando a su portavoz municipal, José Crespo, a preguntarse si debe seguir en política local tras ocasionar graves perjuicios a los vecinos y empresarios de Lalín por la demora en aprobarse los presupuestos. También matizó que no pedirá su dimisión como hubiera hecho, ya lo había anunciado, en caso que no hubiese prosperado la citada moción en caso de haberse llevado adelante.

Rafael Cuíña calificó de bastante grave el «teatro» del PP que ha causado daño a los intereses de los vecinos, esperando casi hasta final de plazo para anunciar que no habría moción de censura y retrasando así la entrada en vigor del presupuesto para este año. Aseguró que el gobierno local esperaba esa decisión y que no estuvieron nerviosos durante el proceso ni un solo segundo. Afirmó que Crespo y su equipo de trabajo cayó «nun ridículo estrepitoso», aseverando que estuvieron intentando buscar cualquier subterfugio legal para presentar la censura con el apoyo de quien fue presidente provincial de los populares, Rafael Louzán, al que acusó de ser especialista en mociones de censura. Incluso dijo tener información de que se barajó dar el bastón de mando al edil no adscrito, Juan José Cruz, al que tildó de «personaxe político imprensentable», acusando a los populares de falta de respeto absoluto al cargo de alcalde. Aseguró que recurrieron a una actitud que rozó lo antidemocrático con tal de desbancar a quienes «fomos escollidos para o cambio en Lalín».

El regidor dijo que el gobierno sabía la repercusión mediática que supondría presentar la moción de confianza y perderla, pero asumieron ese desgaste con el fin de contar con un presupuesto para este año, el mejor para los vecinos. Dijo que el retraso ha generado perjuicios a la economía local para afirmar que a Crespo Iglesias quizás no le gustan las buenas noticias en todos los parámetros, desde paro a apertura de comercios, que se producen en Lalín en estos dos últimos años. Le recordó la pérdida de miles de votos en los comicios del 2015 por el PP por la actitud prepotente y la «xestión absolutamente nefasta» en el gobierno, achacándoles despilfarro. Lo ejemplificó en el nuevo consistorio, con 15 millones de euros de coste; si se hubiera empleado tan solo un tercio de esa cantidad en sumideros, todo el rural ya contaría con red de alcantarillado. Y dijo que no iba a caer en los insultos aunque deslizó una alusión a «cobardes políticos» para los populares.

Negó Cuíña el incumplimiento de acuerdos plenarios significando que ellos lo han hecho por ejemplo con el tema de los planes europeos y el Dusi. Rebatió la supuesta irrelevancia del Concello al significar que muchos alcaldes de todo signo político o la Diputación les ponen de referencia, aunque reconoció las dificultades para llegar a acuerdos con la Xunta. Y anunció la inminente puesta en marcha de mucha obra en Lalín, «o que vai facer sofrir ao PP». Pese a las críticas a los populares, el gobierno no cierra las puertas al diálogo con esta formación, lamentando que no quisiesen negociar los presupuestos y que ni siquiera presentasen una enmienda.

Además calificó de calumnia grave que el PP asegurase que hay vecinos y empresas amenazados por el gobierno local, exigiendo explicaciones y datos públicos. Dijo que si hubiese seguido esta formación al frente del Concello, este tendría un alto porcentaje de estar en quiebra y no existirían las fragas de Catasós.

Presupuesto ya para mediados de julio, con prioridad a actuar en el rural

Cuíña Aparicio reiteró que llega una época de muchas obras, con la puesta en marcha de las primeras actuaciones financiadas con el Dusi en Lalín de Arriba, entre otros proyectos como en el rural. Precisamente en las parroquias se centrarán las primeras actuaciones ya con el presupuesto del 2017 disponible, desde puntos de luz a bacheos, la denominada por él como «política básica». También podría afrontarse con fondos municipales la reparación del auditorio ante el silencia de Xunta y Diputación, aunque confía en el compromiso de Román Rodríguez.

El regidor confía en tener ya a mediados de julio solventado el trámite pendiente para disponer del presupuesto. Y augura que será el que se prorrogue en el 2018, con el plan Dusi salvado, aunque está abierto a negociar de cero con el PP si hay posición constructiva.