«Detectamos las posibles restricciones del fluir del cuerpo y las corregimos»

amelia ferreiroa LALÍN / LA VOZ

LALÍN

miguel souto

La metodología empleada en Lalín por Pilar Rodríguez, ostéopata sacrocraneal biodinámica, evalúa alteraciones y las subsana a través de las palpaciones

13 nov 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Su proximidad para con las terapias manuales desde muy joven, y desde el prisma de usuaria, llevó a esta vizcaína de nacimiento y residente en Lalín en los últimos veintidós años a introducirse profesionalmente en el mundo del masaje y de la osteopatía. Pilar Rodríguez Besteiro, nacida en Basauri (Vizcaya), criada en Lugo y afincada en la capital dezana, es osteópata sacrocraneal biodinámica.

-¿En qué momento emerge ese interés, pero ya profesional, por las terapias manuales?

-Desde muy joven el mundo de las terapias manuales me estuvo muy cercano desde el punto de vista de usuaria. No era nada nuevo para mi. Un día surgió la posibilidad de estudiar masaje y eso me condujo posteriormente a introducirme en la osteopatía; ahí fue donde sentí realmente la conexión con esta técnica; lo grandioso de este movimiento y este fluir que me era totalmente desconocido. Supe que ese era el camino que tenía que recorrer y es el que sigo recorriendo.

-¿Qué es la osteopatía sacrocraneal biodinámica?

-Es una terapia que se basa en el principio de la existencia de una pulsación rítmica que emerge en los tejidos y fluidos del núcleo del cuerpo. En nuestro cuerpo existe pues un fluir, una marea en el océano interior que forma la sangre, linfa, líquido extracelular y el cuerpo se comporta como un ecosistema donde todos los elementos funcionan coordinador e interrelacionados los unos con los otros. De este fluir depende en gran medida el buen funcionamiento de un tejido, un órgano o un sistema. Con la osteopatía sacrocraneal detectamos las posibles restricciones del fluir del cuerpo y las corregimos. Es una terapia que nos permite evaluar y corregir a través de la palpación. Es un sistema que está relacionado con la salud y el bienestar del cuerpo entero.

-¿Y lo de biodinámica?

-Es el movimiento biológico del cuerpo que se produce constantemente aunque la persona esté en el reposo más absoluto.

-¿Estamos ante una terapia manual conocida e implantada?

-Los métodos de tratamiento a través de la manipulación de estructuras corporales con las manos pueden ser tan antiguos como la humanidad misma. Podemos encontrar diversos procedimientos terapéuticos con principios similares en todo el mundo y que se fueron desarrollando y perduraron durante siglos hasta la actualidad. Sin embargo la historia de la osteopatía moderna nace con el doctor Sthill a finales del siglo XIX, y él le dio este nombre por ósteo (hueso) y pathi (sentir); sentir el hueso. La osteopatía sacrocraneal es menos conocida por el público en general que la osteopatía estructural pero forman parte de la misma disciplina terapéutica.

-¿Qué dolencias se pueden tratar con la misma?

-La osteopatía sacrocraneal se utiliza para tratar una amplia variedad de problemas de salud. Es importante destacar que se trata de una terapia suave y segura y que es sumamente apropiada para personas de todas las edades, desde bebés hasta ancianos. Algunos de los problemas de salud más comunes que pueden verse mejorados con esta terapia son los trastornos y llantos de los bebés, problemas posparto (madre y bebé), estrés, ciáticas, migrañas, neuralgias, ansiedad, dolores articulares, esguinces cervicales e incluso cuando existen determinados problemas digestivos. Es importante puntualizar que se trata, a través de este tipo de terapia, de corregir en la medida de lo posible aquellas alteraciones que se nos presentan y que están dificultando la tendencia natural de nuestro cuerpo a la salud.

Liberación emocional y metamórfica. Son técnicas empleadas también por la osteópata. La metamórfica, más usada en adultos, es útil en mujeres embarazadas como terapia preventiva y de ayuda al parto.

Proyectos. Ampliar conocimientos en osteopatía bioenergética pediátrica.

«Apuesto por un ambiente silencioso al requerir la técnica concentración»

Un terapeuta entrenado puede percibir y testar, como lo hace Pilar, el movimiento sacrocraneal en cualquier parte del cuerpo. Se puede, de esta manera, acceder a información acerca de las diferencias que presenta el movimiento.

-Es una técnica aplicable, como dijimos, a personas de cualquier edad y para un abanico amplio de patologías con la que no se trata tanto de curar un determinado síntoma sino de facilitar la respuesta autosanadora que el propio cuerpo posee. Por supuesto que no sustituye al tratamiento médico que puede prescribir el facultativo pero sí que es compatible con el mismo en la mayoría de los casos.

-Comentaba que es efectiva en situaciones, en muchos casos traumáticas para los padres, como es ese llanto persistente del bebé.

-En este caso lo primero que hay que tener en cuenta es que si el niño llora es porque hay algo que no está bien. El primer paso es siempre consultar con el pediatra para que haga una valoración de lo que le puede estar pasando y prescriba el tratamiento oportuno. Un buen diagnóstico es fundamental. Descartado un problema mayor podemos pensar en algo digestivo, nervios, que esté asustado o que no duerma bien. El bebé puede percibir conflictos que está viviendo la madre o en su entorno y eso deja una huella que graba una memoria en el pequeño que hay que borrar. Son técnicas que requieren de un aprendizaje considerable y muchas horas de práctica y personalmente apuesto por practicarlas en un ambiente silencioso ya que necesito percibir con mis manos el fluir del cuerpo, el mínimo movimiento de los huesos del cráneo, las articulaciones y la respiración y todo ello requiere de mucha concentración.