Uno de los proyectos se presenta por alumnos del instituto Aller de Lalín
08 nov 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Las cifras son cada vez mayores en Galiciencia. La más relevante feria científica y educativa de Galicia, que se celebrará en la Tecnópole del 16 al 18 de noviembre, ha recibido este año más de cien proyectos de 35 colegios e institutos de Galicia, Cataluña, Euskadi y, como novedad de esta edición, Asturias. Las visitas de grupos escolares superarán la barrera del 2.000.
Además de 50 trabajos en la sección competitiva, firmados por estudiantes de Secundaria y Bachillerato, la feria exhibirá también los proyectos de investigación de 25 grupos de alumnos de Educación Primaria.
Los temas escogidos para las investigaciones son variados y abarcan diferentes áreas; en muchos casos, los alumnos proponen soluciones para problemas de actualidad, como el de la plaga de avispa asiática, o para cuestiones muy vinculadas a la sociedad en la que viven, caso del estudio de un pastillero inteligente para personas polimedicadas.
Los jóvenes y sus familias podrán disfrutar de las actividades científicas paralelas a la exposición, que estará abierta al público en la Tecnópole, con acceso gratuito, de 10 a 13 horas y de 15 a 18 miércoles, jueves y viernes.
Este año el protagonismo de ese apartado corresponderá a las matemáticas. El desafío lanzado en abril por la organización de Galiciencia bajo el título «Atrévete coas matemáticas!» ha consumido ya varias etapas virtuales; los alumnos de Secundaria y Bachillerato que las superaron afrontará la etapa final, en persona, durante los días de la feria.
Las matemáticas
Además, habrá talleres, abiertos a toda la familia, para conocer la relación de las matemáticas con la ingeniería y la naturaleza; el objetivo es demostrar que los números están muy presentes en nuestra vida cotidiana.
En la misma línea, tendrá lugar un espectáculo científico con piezas de Lego. Además, se editará un nuevo número de la revista de Galiciencia, que confeccionarán los participantes en un taller de periodismo.
La evolución del certamen permite constatar un incremento del nivel científico de las propuestas elaboradas y un mayor interés de los centros educativos y de los alumnos por experimentar con propuestas en las que la fiabilidad sea condición básica sobre la que sustentar todo el desarrollo del trabajo.
Así, la organización de Galiciencia, que cuenta con el respaldo de la Consellería de Economía, Emprego e Industria y de la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología, destaca el incremento de las colaboraciones de instituciones dedicadas a la investigación.
Expertos, universidades y centros especializados figuran en la nómina de colaboradores o asesores de numerosos proyectos. Así, en Galiciencia 2016 podrán verse trabajos en los que, de un modo u otro, han participado las universidades de Vigo y A Coruña, el Centro de Experimentación e Formación agroforestal de Lourizán, la Estación de Ciencias mariñas de Toralla y la Coordinadora para o Estudo dos Mamíferos mariños.
Educación para la salud
Una de las novedades de esta edición es una exposición sobre la depresión infantil y juvenil. La organiza el Sergas, que también ofrecerá un taller a profesores de enseñanza media para ayudarles a detectar este tipo de problemas de salud en sus alumnos, con el objetivo de atajarlos a la mayor brevedad posible.
La exposición incluye fotografías realizadas por adolescentes con trastornos depresivos.
El IES Aller Ulloa de Lalín se estrena con un proyecto que estudia la molécula de la vida
Algo tan simple, y a la vez tan complejo, como el agua es el objeto del proyecto que presenta el instituto Ramón María Aller Ulloa de Lalín que se estrena en este certamen. El proyecto es obra de la profesora de Biología, Natalia Fernández. Explica que diseñó la experiencia a partir del estudio de la molécula del agua que los estudiantes dan en clase. Lamenta que a la feria científica solo pueda llevar a dos alumnos porque «me gustaría poder llevar a toda la clase», Los afortunados serán en esta ocasión Antía Rodríguez y Xosé Carral, alumnos de primero de BAC.
Su puesto será el número 19 de la feria y en él los estudiantes mostrarán con experiencias sencillas y con la ayuda de materiales cotidianos como pueden ser el vinagre, la sal, azúcar, huevos, colorante alimentario, hojas de col, tallos de apio o flores propiedades del agua relacionadas a la tensión superficial como la acción capilar, su gran poder disolvente o la ósmosis.
Con las experiencias se pretenden de fomentar la motivación y el interés del alumnado hacia el estudio de la ciencia realizando ellos mismos estas experiencias en las que siguiendo los pasos del método científico se pueden obtener resultados llamativos e inesperados. Para los estudiantes será también una oportunidad para enseñar y explicar a los alumnos que pasen por la feria y a los visitantes en general estos experimentos y conocer otros 49 proyectos de otros tantos centros.