El regidor analizó con el presidente de la AED el proyecto para acometer obras de mejora en el polígono Lalín 2000, con 150.000 euros de inversión
01 ago 2015 . Actualizado a las 05:00 h.El cisma abierto la pasada semana entre el Concello de Lalín y la Asociación de Empresarios de Deza (AED), con un duro cruce de acusaciones entre el regidor, Rafael Cuíña, y el presidente de la patronal, Antonio Lamas, comienza a cerrarse. Ambos mantenían ayer un encuentro para abordar actuaciones en el polígono Lalín 2000 que sirvió para acercar posturas en lo institucional. Ahora el objetivo pasa por mantener el respeto institucional entre ambas partes al margen de posibles discrepancias personales.
La «causa» de ese encuentro entre Cuíña y Lamas fue la comunicación recibida ayer en el Concello desde la Xunta con la concesión de una ayuda para obras en el polígono industrial Lalín 2000. La inversión conjunta se sitúa en los 150.000 euros, aportando 120.000 la Consellería de Economía e Industria, cofinanciados pro el Fondo Europeo de Desarrollo Rural (Feder). Los 30.000 euros restantes saldrán de las arcas municipales.
El gobierno local pretende agilizar los trámites para ejecutar este proyecto. Por ello el alcalde lalinense anunció la convocatoria de un pleno extraordinario la próxima semana para llevar este asunto. Una celeridad en el proceso requerida por la propia Xunta, ya que las obras previstas deben estar ejecutadas como fecha tope el día 15 de octubre. La sesión plenaria viene motivada por la necesidad de aprobar la corporación una modificación de crédito para habilitar la partida de 30.000 euros a abonar por el Concello.
Rafael Cuíña decidía convocar de inmediato una reunión con el presidente de la AED tras la confirmación de esta ayuda con el fin de abordar de forma conjunta dónde realizar las actuaciones en Lalín 2000. Un encuentro además para limar asperezas y restablecer las relaciones rotas la pasada semana a raíz de la divergencia de criterio en torno a una propuesta para traslado de puestos ambulantes el día 3 de agosto y organizar una Feira do Emigrante en el casco urbano.
El regidor y el presidente de la patronal dezana analizaron unos trabajos que consistirán en regenerar los pavimentos en diferentes tramos viarios del polígono industrial, así como la reparación de elementos de señalización horizontal. Para Cuíña, la iniciativa resulta «importantísima para o tecido empresarial do municipio».
Y aprovechó el alcalde lalinense para lanzar un mensaje con el trasfondo de la polémica vivida hace unos días. En este caso para hacer un llamamiento a «actuar con altura de miras e responsabilidade institucional nun proxecto que redundará en beneficio dun dos principais centros industrials e empresariais da comarca do Deza e, en consecuencia, da economía do noso Concello». La pretensión es comenzar en el menor plazo posible con las obras.
Habilitar la partida municipal requerirá llevar el asunto a pleno extraordinario