Katerine Gutiérrez y Eduardo Orozco lanzan la plataforma Traces of the world
01 nov 2024 . Actualizado a las 21:20 h.Katerine Gutiérrez Villaverde y Eduardo Orozco son una pareja a contracorriente. En pleno vaciado del rural gallego se han instalado en Cachafeiro (Forcarei) y le han declarado la guerra a la fast fashion lanzando una plataforma de venta de moda sostenible. Una especie de Amazon en el que tendrán cabida todas las marcas que ofrezcan ropa de calidad elaborada mediante procesos artesanales o sostenibles y pensadas para perdurar en el tiempo y para dejar la mínima huella posible en el planeta.
Esa plataforma que está despegando lleva por nombre Traces of the world y es el segundo paso que da la pareja en su camino hacia la sostenibilidad. El primero fue el lanzamiento de su propia marca de ropa sostenible, Traces, que nació en México en torno al año 2018. «Traces significa ‘rastros’ y tiene doble sentido: el rastro del patrimonio cultural que buscamos investigando los procesos textiles artesanales y el rastro que dejamos en la Tierra», explica Katerine Gutiérrez. La marca llegó a tener hasta siete tiendas físicas en México, pero con la pandemia la pareja le dio una vuelta al proyecto y decidió mantener la marca apostando también por una plataforma multimarca de venta de moda sostenible que es la que ha traído a Katerine y Eduardo a Galicia,
Katerine es hija de Concepción Villaverde, una mujer de Cachafeiro (Forcarei) que emigró a Holanda y echó raíces allá. La hija estudió diseño en Ámsterdam y recorrió medio mundo trabajando en el sector de la moda y la consultoría estratégica de negocios. Vivió en París, Madrid, Marbella, Barcelona, México o Nueva York antes de regresar a Forcarei para impulsar su nuevo proyecto junto a Eduardo Orozco, que es de origen mexicano.
«Nos pusieron a nuestra disposición la casa familiar de Cachafeiro y vamos a empezar desde aquí. A Galicia siempre le he tenido un cariño especial. Cuando eres emigrante, parece que no tienes un ancla y esta casa siempre nos ancló a toda la familia. Es un buen lugar para entrar de nuevo en España», cuenta la diseñadora. Para lanzar la plataforma Traces of the world la pareja cuenta con un tercer socio, Joel Bucio, un mexicano afincado en Valencia que se encargará de la parte tecnológica del negocio.
La idea es operar desde Galicia y ofrecer marcas sostenibles. La plataforma ha arrancado solo con la marca propia, Traces, pero de aquí a final de año espera sumar cinco más y luego lanzará una campaña de márketing para buscar nuevas adhesiones.
Una marca contemporánea en el diseño y artesana en la elaboración
Después de estudiar diseño, Katerine, defraudada con el modelo imperante, desconectó un tiempo del mundo de la moda. Enganchada a la sostenibilidad, tenía claro que, si algún día volvía a la moda, lo haría por esta vía. Así fue como nació la marca Traces, tras ocho años investigando los procesos artesanales en Chiapas. Katerine diseña las prendas, que se confeccionan en México artesanalmente. «No es ropa folklórica. Son diseños contemporáneos pensados para un consumidor europeo que está muy definido: que busca prendas hechas a mano, de materiales naturales y que perduren», explica la diseñadora. Basándose en estudios que avalan que existe un mercado para este tipo de prendas, Katerine quiere generar una alternativa sostenible en el mundo de la moda, «un sector que deja huella y no la más positiva». La firma abrirá del 15 de noviembre al 15 de diciembre una tienda pop -up en Ourense (Rúa do Paseo, 11) para dar a conocer sus productos y su filosofía.