Forcarei, entre los cinco lugares de Galicia donde se produce Mel 5 Estrelas

m. cedrón REDACCIÓN / LA VOZ

FORCAREI

MARCOS MÍGUEZ

06 dic 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

La nieve cubre Piornedo. Las colmenas de Isabel López están a 1.200 metros de altura. Hace tanto frío que las abejas «están na súa casiña, gardadiñas». En primavera, durante la época de la floración, a Isabel le gusta sentarse delante de ellas para ver cómo trabajan las obreras: «Velas entrar coas patas cargadiñas de polen... ¿E como tratan aos zánganos? Fecúndanas e cando ven que están comendo de máis, pero non fan nada, mátanos. ¿E a raíña?, Vive para poñer ovos, e só come do mellor: xalea real», explica. Isabel podría hablar de ellas durante horas. Ha obtenido además uno de los distintivos de Mel 5 Estrelas que otorga cada año -por ahora van dos- la Asociación Galega de Apicultura (AGA).

El jurado tuvo que escoger entre las 65 muestras seleccionadas: 14 de multifloral y 51 monoflorales, repartidas entre 25 de castaño, una de eucalipto, 7 de queiroga y 18 de melato de carballo. Escogieron cuatro. La de Isabel y las de José Luis Pérez, José González y Amable Pérez. Además de ella, estos tres apicultores obtuvieron el Mel 5 Estrelas, pero en la categoría de castaño, multifloral y mielato de castaño, respectivamente.

Para José y su hermano Rubén las abejas «son perfectas». Llevan más de 15 años trabajando con ellas, retomando un trabajo que ya hacían sus abuelos «nun lugar tan privilexiado como é este onde temos os asentamentos, onde collen o microclima do Ulla e a montaña», explica José, quien ha logrado el Mel 5 Estrelas para su variedad multifloral. Es el resultado de un trabajo bien hecho y de unas condiciones favorables, privilegiadas. Su miel, dice José, empezará a comercializarse la semana que viene bajo la marca Berce, «porque é un produto que se da no berce de dous ríos, o Ulla e o Umia».

Y ahí estos primeros días de diciembre también nevó. La nieve cubrió las colmenas de José en Forcarei. Pero ellas saben protegerse, forman equipo: «Son previsoras, saben moito. Coñecen cando empeza o inverno, cando chega a primavera. Son un exemplo de reprodución e de organización», explica José. Durante la charla su voz delata esa combinación de respeto y admiración por sus abejas, como el resto de premiados.