Pichel acusa a Cachafeiro de «delito penal» por retirar documentación del Concello

La Voz

FORCAREI

MIGUEL SOUTO

La popular dice que se llevó los originales creyéndolos copias

18 oct 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Las aguas andan revueltas en el Concello de Forcarei, donde el equipo de gobierno de la socialista Verónica Pichel acusa a la líder de la oposición, la exalcaldesa popular Belén Cachafeiro, de un delito penal por haber retirado documentación oficial municipal del Concello, en formato original.

Según explican desde el gobierno, la exalcaldesa sacó el miércoles de las dependencias del Concello información oficial sobre dos expedientes administrativos. La alcaldesa, Verónica Pichel, había autorizado al personal municipal a dar acceso a Cachafeiro a varios expedientes solicitados para su consulta y acusa a la popular de salir del edificio del Concello «coa documentación orixinal sobre a área de Igualdade e Servizos Sociais e sobre a actividade do Circuíto da Madalena».

Según el gobierno, al percatarse de lo sucedido, el secretario emitió una resolución firmada por él y por la alcaldesa Verónica Pichel recordándole a Cachafeiro que la legislación recoge expresamente que en ningún caso los expedientes podrán salir de la casa consistorial, ya que se incurriría en un delito penal.

El gobierno asegura que, tras varias horas y tras la advertencia formal, la edil popular devolvió la documentación de forma irregular, depositándola en el domicilio de una trabajadora municipal en lugar de entregarla en el Concello.

La exalcaldesa, por su parte, explica que el miércoles acudió al Concello para recoger, entre otras, las copias de un expediente sobre las subvenciones de Igualdade que había solicitado hace un mes, tras tomar posesión como edil de la oposición. Según cuenta, al llegar pidió la documentación, que le fue entregada sin que nadie le especificara que eran los originales y no las copias. Después se fue al despacho de Intervención a firmar resoluciones de la alcaldía que todavía tenía pendientes rúbrica. Al terminar se fue a su casa con las carpetas recogidas, sin haberlas mirado y creyendo que contenían copias.

Según dice, al percatarse del error, a las seis de la tarde llamó a un funcionario y le llevó los expedientes a su casa para no tenerlos en su poder un minuto más, ya que el Concello estaba cerrado. Ayer regresó a la casa consistorial para comprobar que el expediente había llegado a su destino y para solicitar, ahora sí, las copias.

Nerviosismo

«Entiendo que estén nerviosos porque estamos hablando de un expediente en el que sabemos de la existencia de irregularidades. Pagaron facturas sin haber realizado la actividad», asegura Cachafeiro. «Pero en todo caso el error es de ellos, que tienen la obligación de custodiar los expedientes y la documentación. A mí no se me dijo en ningún momento que eran originales y yo me los llevé creyendo que eran copias y no los miré hasta llegar a casa. No le voy a permitir a Pichel ni una insinuación de delito. La que va a tener una denuncia va a ser ella», dice Cachafeiro.