La CIG anuncia movilizaciones y huelga «medida» en el Servizo de Axuda no Fogar de Forcarei

La Voz A ESTRADA / LA VOZ

FORCAREI

r. g.

07 feb 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

El portavoz comarcal de la CIG, Antón Álvarez Meralho, avanza la convocatoria de movilizaciones y de huelga en el Servizo de Axuda no Fogar (SAF) de Forcarei si no se soluciona el relevo a la concesionaria actual, Serinter, que ha entrado en concurso de acreedores. La próxima semana, el sindicato iniciará el «reparto masivo de panfletos» en los núcleos de Forcarei y Soutelo para informar a los ciudadanos de la situación. El siguiente paso será la convocatoria de una concentración y, si no hay una respuesta satisfactoria por parte del Concello, la CIG advierte de la convocatoria de huelga, aunque precisa que será una «folga medida á situación, para non deixar a certa xente sen servizo».

La empresa concesionaria del servicio, Serinter, se encuentra en concurso de acreedores desde octubre y, según la CIG, abocada a un ERE extintivo por las deudas con la Seguridad Social tanto en el pago de las cuotas de las 16 trabajadoras de Forcarei como de las 34 que tenía en el Concello de Silleda, donde otra empresa ya ha tomado el relevo en el servicio. Según el sindicato, Serinter adeuda unos 140.000 euros a la Seguridad Social y 15.000 a las trabajadoras, aunque las nóminas en Forcarei ahora están al día.

En Forcarei, el contrato se ha mantenido a la espera de conseguir una nueva adjudicación. Sin embargo, en el proceso abierto, pese a ofertar el precio por hora más alto de la zona, el Concello forcaricense solo consiguió una candidata: Galaurea. A la hora de la verdad, la única empresa interesada no presentó la documentación y el concurso quedó desierto. En el fondo del rechazo del contrato por parte de Galaurea está la reciente jurisprudencia que podría obligar a la firma a asumir las deudas pendientes de Serinter.

En este escenario, la CIG advierte que la presentación del ERE de extinción es solo cuestión de tiempo y que, si el Concello no reacciona, en quince días se extinguirán la empresa y los puestos de trabajo y el servicio quedará descubierto. Para el sindicato, las únicas salidas posibles son que el Concello haga un contrato menor con otra empresa para atender el servicio mientras se resuelve un nuevo concurso público -considera que no sería fácil- o que asuma temporalmente el personal actual directamente para seguir prestando el servicio a los setenta usuarios.

Desde la oposición, el BNG pide que se remunicipalice el servicio con la subrogación directa e inmediata del personal y el PSOE reclama una junta de portavoces para analizar la situación del servicio y buscar una salida que evite que el servicio se suspenda.