Las viviendas turísticas comienzan a hacerse hueco en la oferta abierta en la zona

Javier Benito
javier benito LALÍN / LA VOZ

FORCAREI

Cedida

Mientras decaen las casas rurales, esta alternativa gana protagonismo

30 jul 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El repunte del sector turístico en España en los últimos años, tras un parón significativo por la crisis al menos para el perfil del viajero nacional, incrementa nuevas ofertas que hasta ahora estaban poco asentadas en Deza y Tabeirós-Terra de Montes. Mientras en la última década languidecieron las casas rurales, con menor número abiertas en las comarcas, al descender de 60 a 51 entre el 2008 y este año, durante este período comenzaron a funcionar desde apartamentos a viviendas turísticas, ahora en plena actualidad por la mayor presión de Hacienda para controlar estancias, contratos y precios de los alquileres.

El último ejemplo de esa oferta alternativa surgía estos días en Forcarei, en A Chousa, con una casa familiar restaurada que funcionará varios meses al año como vivienda turística. Una fórmula innovadora que empieza a tener presencia en los últimos tiempos en la zona, donde ya operaban otras siete, todas ellas en Tabeirós-Terra de Montes. Cinco están en A Estrada, con capacidad conjunta para 36 personas en 17 habitaciones, mientras las otras dos se asientan en Forcarei, con cinco estancias para un máximo de catorce alojados.

Mientras, en Deza tan solo se cuenta, según los datos del Instituto Galego de Estatística (IGE), con un único apartamento turístico abierto, en Lalín, con capacidad para catorce personas. En Tabeirós-Montes no figura oferta de apartamentos turístico.

A Chousa acaba de ponerse en funcionamiento en Forcarei

Cada vez son más los que prefieren pasar sus vacaciones alejados de las grandes urbes y disfrutando de la naturaleza y la tranquilidad que el rural puede ofrecer para pasar unos días familiares o con amigos lejos del domicilio habitual.

La casa de A Chousa, en el lugar de Gaxín en Forcarei, es un ejemplo de este reclamo. Se encuentra en un enclave solitario y al mismo tiempo cercano al pueblo, un lugar perfecto para descansar y meditar. Su propietaria, Virginia Pichel, restauró la casa construida en 1940, propiedadde sus padres y lugar donde se crio hasta que tuvo 16 años. La convirtió en vivienda vacacional este año y la pone en alquiler desde el mes de mayo a septiembre u octubre, cuando empieza el frío.

El inmueble, de dos alturas, cuenta con cuatro habitaciones ­- tres de ellas con cama matrimonial y una con dos camas- tres baños, amplia cocina, comedor con chimenea, porche y un gran terreno. En el jardín disponen de una mesa de piedra para 12 personas y parrilla para cocinar. La restauración de la casa respeta en todo momento la original, conserva la misma organización, las mismas puertas y cocina y varios elementos y utensilios antiguos que allí había y que pertenecían a su familia. De la decoración se ocupó una interiorista que vino de Pontevedra y que ayudó a que A Chousa no perdiera su esencia.

Virginia Pichel puso en alquiler la casa ya que vive todo el año fuera de Forcarei, no podía acercarse y no quería tener la casa cerrada y en desuso. La acomodó para turistas y cuando fue al Concello a presentar el documento para dar la casa de alta, recibió el agradecimiento institucional por esa ampliación de la oferta turística en el municipio. De la casa, lo que más resalta su propietaria es el silencio del lugar donde se ubica: «Solo se oyen los pájaros y los árboles que con el viento a veces parece que escuchas el mar». Un lugar perfecto para amantes del campo.

El precio es de 900 euros por semana, 1.500 por quince días, 2.400 euros por mes y en el caso de alquilarla días sueltos, el precio será de 170 euros el día. Las primeras reservas se esperan para este próximo mes. Los primeros en estrenarla serán una familia de Madrid que llegará para pasar en la casa una semana. Las reservas pueden hacerse a través de Internet, donde algunas páginas web de diferentes tipos de alojamientos la ofertan.