En esta edición se recupera el tramo de Carballeda, aunque con recorrido contrario y bastantes cambios
16 mar 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Cuando algo funciona mejor no tocarlo. Una máxima adoptada por la Escudería Lalín Deza para esta edición del rali, donde de forma mayoritaria se repiten tramos cronometrados. Saborida y Rodeiro-Dozón -en este caso a pesar del recorte de kilómetros- marcarán las diferencias entre los pilotos que aspiren a la victoria final. El cambio más significativo está en la inclusión del tramo de Carballeda, como hace años pero a la vez totalmente diferente. Analizamos cada uno de los tramos:
Lalín de Arriba (1,65 kilómetros; hoy a las 21.00 y mañana a las 20.25): El tramo espectáculo, este año con dos pasadas para abrir y cerrar el rali, mantiene el trazado y los pilotos deberán estar muy atentos a los bordillos. La posibilidad de lluvia complica más la conducción, con mucho que perder y poco que ganar por su corta distancia, al menos esta noche.
A Estrada-Silleda (15,4 kilómetros; pasadas a 8.10 y 11.25): De nuevo mismo recorrido, con una primera parte del tramo más delicada y que comienza con carretera de dos carriles pero con riesgo de que patinen los coches, con rasantes, para después ir estrechándose. Ya en la zona de Silleda hay lugares resbaladizos que pueden generar dificultades.
O Couto (9,6 km.; 8.50 y 12.05 horas): Entre los tramos clásicos del rali, con mucha exigencia técnica, con frenadas fuertes y un final estrecho. Al ser un recorrido corto reclamará máxima concentración para marcar buenos tiempos, además de tener zonas muy rápidas y fuertes frenadas en bajada.
Saborida (14,8 km.; 9.20 -TC Plus-, 12.35 y 15.20 horas): Muy técnico, donde los pilotos pueden arriesgar y correr al máximo aunque no faltan enlazadas, curvas y alguna rasante con complicaciones. La inclusión de tres pasadas posibilitará que se marquen diferencias entre los principales aspirantes a la victoria y el resto.
Carballeda (12,7 km.; 16.10 y 19.05 horas): Trazado recuperado pero casi solo en el nombre ya que la carrera discurre al revés que en ediciones pasadas, con partes muy rotas y otras estrechas, de inicio por zona de monte, para tener un final más plácido en carretera más ancha.
Rodeiro-Dozón (15,15 km.; 16.50 y 19.45 horas): Este tramo ya se corrió el pasado año aunque se recorta de forma significativa en su parte inicial, frente a los 22,8 kilómetros anteriores. Puede marcar diferencias junto a Saborida y en menor medida O Couto. En especial la última pasada al ser de noche y con riesgo de lluvia, además del frío. Los pilotos deberán hilar muy fino porque cualquier despiste puede pagarse caro.
Una edición anterior de la carrera dezana FOTO