Nieves Negro celebró sus 105 años rodeada de su familia

Rocío Perez Ramos
Rocío Ramos LALÍN / LA VOZ

AGOLADA

Cedida

La mayor alegría para esta vecina de Agolada es tener visitas de los suyos dejando atrás las restricciones de la pandemia

02 nov 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Nieves Negro Barrio sopló ayer las velas de su 105 aniversario. Un cumpleaños especial en el que pudo volver a estar rodeada de su familia. El pasado año las restricciones de la pandemia la obligaron a tener una celebración solo compartida con su hijo Abel y su nuera Gloria, con los que reside. Los demás no pudieron desplazarse y Nieves tuvo que conformarse con los abrazos, los besos y el cariño que le transmitieron hijos, nietos y bisnietos, por videoconferencia. Esta vez pudo disfrutar de ellos en directo.

Vecina de A Penela, en la parroquia de Esperante (Agolada), tiene tres hijos, cinco nietos y dos bisnietos: Pepe que va a cumplir cinco años y Telmo, de tres y medio. Ayer estuvieron con ella dos de sus cinco nietos y faltó uno de sus hijos y sus bisnietos. Su nuera Gloria explica que «ten o sentido todo e leva conta de todo». El pasado año a Nieves el día de su cumpleaños le pesó la ausencia de los familiares que no pudieron ir a verla. Gloria recordaba ayer que «chorou moito ese día» porque temía que igual no iba a vivir para volver a verlos reunidos a todos.

Ayer llegó de nuevo el día y las circunstancias ya permitieron una celebración que la familia y Nieves disfrutaron mucho.

Su mayor alegría es que la pandemia se vaya disipando y que de un tiempo a esta parte ya pueda recibir visitas. Ayer presidió la mesa rodeada del cariño de los suyos. Gloria señala que con el paso del tiempo le van fallando las piernas pero aún baja los escalones hasta la planta baja de la casa con ayuda.

A las 11.00 horas se levanta, sigue desayunando un tazón de cereales, y si hace bueno aún da un paseo por la aldea en la silla con su nuera. Gloria cuenta que «lle damos unha voltiña para tomar o aire, pero ela que é moi faladeira e lle gusta contra un conto, moitas veces bota de menos non falar coa xente porque agora cada vez hai menos xente e ás veces volvemos sen ver a ninguén».

Siempre fue una mujer muy activa que llegó a los 100 sin tomar ningún medicamento, con 102 aún andaba por el jardín sin poder resistirse a echar una mano quitando las hierbas y con 105 sigue disfrutando de una gran calidad de vida. Desde aquí nuestras felicitaciones y que siga disfrutando de su familia y su cariño mucho tiempo.