De momento, explicaba ayer el alcalde de Agolada, Luis Calvo, ninguna de las parroquias del municipio tiene problemas de suministro de agua pero son ya tiempos de escasez y en varias parroquias hay ya preocupación de que puedan tener problemas a medida que avance el verano. No es algo nuevo.
El regidor comentó ayer su intención de reunirse esa misma tarde con los vecinos de las parroquias de Ramil, Basadre y Basadroa para que los vecinos le transmitieran sus inquietudes, le informasen como está la situación y luego «veremos que podemos facer», apuntó.
Calvo señaló que había muchos problemas con las traídas de agua, al menos así se lo transmitían, y que estaba manteniendo encuentros para conocer primero de cerca y con detalle esos problemas de los que le hablaban y luego ver qué medidas se podía n adoptar desde el Concello para arreglar esas deficiencias.