Las deficiencias del centro de salud de Agolada llegan a la Inspección de Trabajo

Rocío Perez Ramos
Rocío Ramos LALÍN / LA VOZ

AGOLADA

Cedida

Reclaman que se garanticen las vías de evacuación en caso de incendio, se arreglen humedades y el sistema eléctrico

23 may 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Las deficiencias del centro de salud de Agolada llegaron a la Inspección de Trabajo después de varias reclamaciones por parte de la CIG en representación de los trabajadores. Hace poco, la inspectora visitaba las instalaciones médicas y el sindicato está a la espera de recibir el informe correspondiente. Las demandas no son nuevas.

Los delegados sindicales de Prevención de Riscos Laborais de CIG-Saúde, Xosé Francisco Alvedro y Antonio Ramos Benito, firman el escrito enviado a Trabajo hace unos meses y que propició la visita de la inspectora. En él informan a la inspección de que el 4 de marzo del 2013 solicitaron una evaluación de riesgos del centro, especialmente de las medidas de evacuación. Los representantes de los trabajadores destacan que el edificio posee rejas en las ventanas y que la puerta se acciona a través de una cédula eléctrica, advirtiendo de que en caso de incendio y de corte del suministro eléctrico el personal y los usuarios del centro podrían quedar atrapados en el interior con el consiguiente riesgo.

En una reunión del 4 de marzo, un mes después, de ese mismo 2013, los delegados de CIG-Saúde alertaban también de que el centro de salud sufría continuos cortes eléctricos. En diferentes reuniones, el sindicato fue advirtiendo de las deficiencias del centro y de estos problemas instando a que se adoptaran soluciones y se quejan que en los últimos años no se tomó ninguna medida.

En varios comités de seguridad la situación del centro sanitario de Agolada volvió a estar presente y los delegados del sindicato preguntaron reiteradamente por las actuaciones llevadas a cabo, sin obtener respuesta. En el escrito a inspección dan cuenta de que en el informe de evaluación de riesgos del centro se incluyen una serie de medidas correctoras pendientes, como la necesidad de colocar una puerta automática que cuente con un mecanismo que permita, en caso de necesidad, su apertura manual, un extintor de más de 6 kilogramos y que se habilite en la entrada y salida en la puerta de entrada al centro, espacio suficiente para que puedan circular personas en silla de ruedas.

Se quejan de que los cuadros eléctricos están sin señalizar y sin tapas, que hay cortes eléctricos habituales por sobrecarga y que el cableado está sin canalizar.

Deficiencias a las que suman las humedades y escorrentías de agua que se producen en la zona destinada a almacén y que, apuntan en la denuncia enviada, motiva la entrada de agua que alcanza «cando chove con mediana intensidade, chegando a ter en ocasións un nivel de auga de varios centímetros de auga acumulada no chan», lo que supone la pérdida de material que, apunta Alvedro, cuesta «miles de euros». Unas deficiencias que consideran tienen que ser subsanadas por el Concello a quien compete el mantenimiento de este centro municipal. Al Sergas le piden mobiliario como camillas articuladas, ya que las que hay son fijas.