Este verano fue tres grados más caluroso que el del año anterior

David Cofán Mazás
David cofán A ESTRADA, LALÍN / LA VOZ

A ESTRADA

miguel souto

En las estaciones meteorológicas de la zona la media registrada fue de 19,8

23 sep 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

El otoño ya está aquí, y comienza luciendo todavía cielos despejados y temperaturas cálidas como recordatorio del tórrido verano y seco que ha afectado a las comarcas de Deza y Tabeirós-Terra de Montes. Como todo en todo el país, en la zona no nos hemos librado de un período estival anormalmente caluroso, con una gran cantidad jornadas superando los 30 grados e incluso algún día donde el mercurio alcanzaba los 40. Si atendemos a los datos que han recogido las estaciones meteorológicas instaladas en nuestro entorno, la temperatura media fue de 19,8 grados, tres más que en el verano del 2021, donde esta se situó en los 16,8.

Como suele ser habitual, los guarismos más elevados se registraron en las estaciones de Lalín y Camanzo (Vila de Cruces). En esta última se dio la temperatura más alta del verano en las comarcas: 40,2. Todo ello descontando aquellos lugares sin datos oficiales como puede ser A Estrada o Silleda, ya que no cuentan con estaciones meteorológicas. En Lalín se alcanzaron los 39,6 grados, mientras que en Mouriscade la mayor fue de 39,3. Por debajo, la más alta en la de Vilarmaior (Rodeiro) fue de 38,1, mientras que en la de la Serra do Faro fue 35,8. La temperatura máxima más suave fue la registrada en Forcarei, 35,6.

Un julio asfixiante

Todos estos datos tienen en común una semana y un mes: la tercera de julio, concretamente del 12 al 14. Fueron los días más asfixiantes del verano y el mes más caluroso. A diferencia del verano pasado, julio fue sumamente cálido, con una media de 21,5 grados, casi cinco por encima de lo vivido un año antes (16,7). De hecho, en ninguna estación la media mensual bajó de los 20, cuando en el anterior registro ni siquiera se alcanzó esa temperatura.

En agosto la canícula dio una pequeña tregua y las olas de calor dejaron de encadenarse con tanta celeridad, no obstante, siguió haciendo bastante. En Camanzo y Forcarei se dieron las temperaturas más altas del mes, con 36,1 y 35,6 respectivamente. En Lalín se alcanzaron los 35,1 y en Rodeiro 34,9. De media fueron 20,5 grados frente a los 17,8 del anterior agosto.

La diferencia es menor en septiembre. Las lluvias y algunas mañanas especialmente frescas han aliviado el ambiente y las medias se han parecido más a las del verano pasado. Con todo, este septiembre sigue siendo más cálido, de media casi dos grados más (17,5 frente a 15,8). En estas últimas dos semanas las temperaturas han sufrido un claro ascenso con el que despedir el período estival de manga corta e incluso con algún chapuzón bien en la playa o en las áreas recreativas de la zona. En Lalín, Mouriscade y Camanzo se superaron los 30 grados en alguna ocasión, llegando a los 31,7 en la estación cruceña como la más alta de este mes.

La temperatura más baja del verano se dio el 2 de septiembre en Rodeiro con 2,6 grados. En la estación de Vilarmaior también se detectaron las más suaves de agosto y julio: 5,3 y 4,6. Además, en Mouriscade se registraron 3,4 el 3 de septiembre.

Las lluvias de septiembre mitigan un período estival muy seco con un 23 % menos de precipitaciones

La sequía fue una de las mayores preocupaciones este verano. Al calor extremo se unió la falta de precipitaciones, recogiéndose un 23 % menos de agua que el verano pasado. En total se registraron 562,2 litros por metro cuadrado en las estaciones de la comarca, mientras que en el mismo período de hace un año fueron 730,7.

Dentro de la tónica general, julio fue el mes con menos precipitaciones. En la estación de Mouriscade se recogieron 6,7 litros por metro cuadrado, en la de Vilarmaior 4,8 y en la de Camanzo 4,2. Además, en Lalín fueron 10,6, en la Serra do Faro 13,4 y en Forcarei 13,4. Aunque apenas sirvieron para paliar la sequía, en agosto cayó más agua. En Forcarei se recogieron 42,1 litros por metro cuadrado, en Vilarmaior 29,2, en la Serra do Faro 28,4, en Lalín 27,6, en Mouriscade 19,6 y en Camanzo 17,4.

En cambio, hasta le fecha septiembre fue lluvioso, mejorando los datos globales del verano. Por ejemplo, en Forcarei se acumularon 114,1. A diferencia de Tabeirós-Terra de Montes, en Deza se acumularon menos litros por metro cuadrado. Donde más fue en la Serra do Faro, con 77,3, seguido de Mouriscade con 67,4, Lalín con 64,4 y Camanzo con 55,6. En cambio, en la de Vilarmaior de Rodeiro apenas aumentó respecto a agosto, quedándose en 33,2.

El embalse de Portodemouros baja del 50 % de su capacidad

Un indicador manifiesto de la magnitud de la sequía y las temperaturas extremas del verano es el embalse de Portodemouros. Unas aguas que bañan Vila de Cruces y Agolada que se encuentran por debajo de la mitad de su capacidad (49,16 %). Esta cifra, si la comparamos con la de la misma semana de hace un año, es seis puntos menor, puesto que se encontraba en el 55,6 %. Los 146 hectómetros cúbicos actuales están también muy por debajo de la media de la última década, 65,22 %.

Esto hace que la aldea de O Marquesado sea cada vez más visible, apreciándose algunas construcciones que suelen emerger prácticamente con la llegada del invierno. Si no se producen grandes cambios, el embalse dejará al descubierto las ruinas de la vieja central y el aserradero, como sucedió en el 2000.