Las rebajas de enero arrancaron con timidez en las dos comarcas

Rocío Perez Ramos
Rocío Ramos LALÍN / LA VOZ

A ESTRADA

miguel souto

Las ventas despegaron en Reyes con compras, la mayoría, a última hora

08 ene 2022 . Actualizado a las 21:53 h.

Las rebajas empezaron ayer en las dos comarcas con timidez. Algo que no es nuevo y con una jornada marcada por los cambios de prendas y regalos en los que los Magos no acertaron con las tallas o los gustos de los destinatarios. Pero también fue un día de compras para los que decidieron ya gastar parte del dinero recibido como aguinaldo. El presidente de la asociación de comerciantes de A Estrada, Acoe, Alfredo González, subraya que «as rebaixas xa levamos vendo moitos anos que non van e parten tímidas coma sempre». Meritxell Silva, representante del sector comercio en la AED y el Centro Comercial Aberto de Lalín, coincide con González y señala que «as rebaixas fai moito que deixaron de ser o que eran». Después de varios días de lluvia intensa, que ayer saliese el sol también animó a salir y en los comercios de la zona se registró alguna actividad pero nada extraordinario.

Los comerciantes coinciden también en que la mayoría espera a comprar más adelante y espera a las segundas rebajas y a descuentos más sustanciosos. Los carteles en las tiendas anuncian rebajas variables que muchos los casos andaban por el 20 y el 30 % de descuento. Algunos establecimientos llegan a ofrecer descuentos hasta incluso el 70 % pero suelen ser algunos productos de forma puntual.

Silva señala que «a xente agarda un pouco porque despois de Reis cos regalos xa está saturada de roupa e espera a poder mercar máis barato».

En A Estrada, Alfredo González comenta que ayer ya se colocaron los carteles de rebajas en las tiendas y esperan que la pista de hielo y las atracciones, que permanecerán abiertas hoy y mañana, y que también lo estuvieron ayer, contribuyan a un buen fin de semana de compras. Ayer fue una jornada de cambio y también de compras para algunos que recibieron dinero como regalo. En Vila de Cruces, la presidenta de la asociación de comerciantes, Lupe Pampín, cree que «as rebaixas non van a pitar» alegando que «competimos coas das grandes superficies e nos non fabricamos e non podemos permitirnos facer descontos tan grades como poden facer eles».

También con mucha calma arrancaron las rebajas en Silleda después de las compras navideñas. En la zona, hubo ya numerosas tiendas que adelantaron algunos descuentos a las vacaciones navideñas en un intento de incentivar las ventas y, como apuntaba Alfredo González, «para poder recuperar xa antes de fin de ano algo de liquidez».

La fiebre del 4 y el 5 y los cierres provocados por el covid

La sexta ola también está pasando factura al comercio. En Navidad las ventas fueron, en general, aceptables, según explican los representantes de las asociaciones de las dos comarcas. Alfredo González apunta que es difícil contabilizar las ventas de los regalos estrictos de Papa Noel porque muchas de las compras se adelantan y son cada vez más los vecinos que adquieren los regalos en noviembre aprovechando los descuentos del Black Friday o del Viernes Meigo, en este caso en A Estrada.

En Lalín comparten esta opinión y las presidentas de las asociaciones de comerciantes de Cruces y de Silleda, Lupe Pampín y Silvia López Romero, coinciden en que las ventas no fueron mal pero no tuvieron nada vez con las de las navidades pasadas en las que las restricciones de movilidad propiciaron que los vecinos optaran para sus compras por el comercio local al no poder desplazarse a las ciudades.

Y si en Navidad, el comercio salvó los muebles, fue pasar esas fechas y la semana siguiente la mayoría de los comerciantes notó un bajón importante que dejó las calles mucho más vacías y los comercios sin clientela.

Las restricciones hicieron que la mayor parte de la hostelería cerrase y sin fiestas en los locales, las ventas de ropa de fiesta frenaron en seco. Influyó también la escalada casi en vertical de los casos de coronavirus en la zona que hicieron que muchos vecinos estuvieran encerrados en su casa por ser positivos o por estar confinados al haber mantenido un contacto estrecho con alguna persona contagiada.

Una situación que afectó también a los comercios. El presidente de Acoe señala que «houbo negocios e empresas que tiveron serios problemas e cinco o seis casos nos que as tendas tuveron que pechar porque todos os traballadores eran positivos». La situación en A Estrada lleva también consigo el miedo y la preocupación de los vecinos que va en aumento. González señala que «o medo é libre, esto está aínda aquí e hai moito respeto. Si antes a algún había que darlle un toque pola mascarilla, agora somos máis conscientes de que hai que levala ben».

Después de esa semana de más o menos parón, la primera semana de enero las compras se reactivaron y los comercios de la zona consiguieron remontar con las ventas de Reyes.

González echó en falta la tradicional Cabalgata de Reyes que ya por si sola llena las calles el día 5 atrayendo a mucha gente. Meritxell Silva señala que en la campaña de Navidad «todo ía moi lento pero os días 4 e 5 foron moi potentes e, de pronto saiu todo o mundo a rúa dun golpe». Una situación que se dio también en el resto de la zona con compras mayoritariamente de última hora y esos dos días sirvieron para mejorar los datos de una campaña que, en general, no fue mala.

Silvia López Romero comenta que «la Navidad en Silleda fue normalita. El 28, el Concello canceló todas las actividades de las fiestas por la situación del covid y el aumento de casos y las calles se quedaron totalmente vacías. No había nadie hasta el 4 y el 5 que estuvieron animados y fue compensando». En Cruces, Pampín, añade también el miedo de los vecinos a una fuerte crisis económica y la subida de todos los gastos de una casa, que también apunta González, ayudan a retraer el consumo.